YNH – Capítulo 078


Capítulo 030 Volumen 02


「… Buenos días, Rey Demonio-sama.」

Una voz que era lenta… Pero definitivamente tenía un peso para llamar a la persona en el trono.

「…」

Quien había caído dormido en el trono era su rey.

Los cuatro subordinados quienes eran leales a su rey esperaban las palabras de este quien abrió lentamente sus ojos.

「… Lo vi, un sueño.」

No hubo nadie que interrumpiera las palabras del rey.

Este observó con un rostro ausente de pensamientos a los subordinados quienes simplemente colgaban sus cabezas mientras esperaban la continuación de las palabras del rey y las sacaba mientras seguía en aturdimiento.

「Era un sueño, donde destruíamos el mundo y nadie se salvaba…」

Era cierto, ese fue un sueño.

Instigando los miedos de toda la humanidad –

Conspirando la discordia de toda la humanidad –

Rompiendo las conexiones de los corazones de la humanidad –

Destruyendo universalmente las naciones de la humanidad –

Era un sueño donde todo era destruido así.

Sin embargo, ese no fue simplemente el final.

El plan ya estaba siendo implementado.

Bajo el nombre del Rey Demonio, primero comenzaron con la destrucción del Reino San Altlis.

Tomando un largo, largo tiempo, esto alcanzó una etapa donde era imposible repararlo.

Ni siquiera la humanidad misma era consciente del hecho de que estaban siendo destruidos.

Era debido a que era un plan de tanto tiempo que incluso el Rey Demonio mismo se había olvidado completamente de esto.

「… Rey Demonio-sama. ¿No es un buen momento -degozaimasu ga?」

「¿Para qué?」

「Para la destrucción de la humanidad… degozaimasu.」

「Fumu…」

Escuchando esas palabras, el Rey Demonio lentamente comenzó a volver a sus pensamientos.

 Primero, sobre donde… Este lugar era.

 El trono donde estaba sentado.

 Y después, el salón de recepción.

 El escenario distorsionado y exageradamente colorido, que se extendía fuera de la ventana.

 Volviendo su consciencia hacia los rincones y grietas del castillo, el Rey Demonio recordó.

 Era así, este lugar era una 『Brecha Dimensional』

 Era una tierra en el otro mundo que se desprendía del mundo.

 Ese lugar, era el castillo del Rey Demonio.

 El castillo de los Mazoku, quienes estaban invadiendo el mundo.

 Entonces, ¿quiénes eran esas personas?

 El Rey Demonio observó a los cuatro leales subordinados que estaban ante él.

 Rojo, azul, negro y blanco.

 Eran cuatro caballeros coloridos que vestían armaduras de apariencia extraña.

 El Rey Demonio recordó.

 Eran sus más poderosos subordinados.

 El Caballero Rojo.

 El Caballero Azul.

 El Caballero Negro.

 El Caballero Blanco.

 Finalmente, sobre quién era el mismo Rey Demonio.

「… Mis cuatro leales caballeros.」

「Sí, Rey Demonio-sama.」

「… ¿Quién soy?」

 Escuchando esa pregunta, los cuatro caballeros temblaron con una profunda emoción.

 Se les estaba dando la oportunidad de expresar lo que sentían por su magnífico Rey Demonio.

「Nuestro Rey, nuestro magnífico Rey.」

 Primero, el Caballero Rojo cantó su alabanza con una voz galante.

「Es quien gobierna sobre el miedo y la discordia. Es el padre de todo el mal.」

 A continuación, el Caballero Azul recito su alabanza con una voz lenta.

「Es la mano que gira el caos y el desorden. Es el rey que viste todo el resentimiento.」

 Y luego, el Caballero Negro recito su alabanza con una voz baja.

「Es la causa primitiva de todo el mal. Es quien teñirá todo en el mundo con sangre.」

 Finalmente, el Caballero Blanco recito su alabanza con una voz refrescante.

「O Rey, nuestro Rey Demonio lkslaas. Es quien guiará a la humanidad a su perdición… El Rey Demonio -degozaimasu.」

 Si, ese era.

 Era allí donde lkslaas finalmente recordó.

 Ikslaas era la causa primigenia de todo.

 Con el fin de destruir el mundo, él avanzó las cosas.

 Pero, aún no.

 Un poco más de preparaciones todavía necesitaban ser organizadas.

「… Mis cuatro caballeros leales. Por ahora, esperen un poco. Guarden su energía para el momento apropiado.」

「Como ordené.」

 Después lkslaas asintió luciendo satisfecho con su respuesta, su consciencia se hundió nuevamente en el letargo.

 Los subordinados de lkslaas.

 Los leales Alva.

 Estos seguramente promocionarían incluso más el caos.

 Por el bien del momento apropiado.

「…」

 Los cuatro caballeros una vez más se hundieron en el silencio como esculturas y observaron en silencio a lkslaas.

 Durante ese tiempo, el Caballero Rojo abrió su boca.

「… Duerme muy bien.」

 El Caballero Azul se puso de pie y giró su cuerpo.

「En ese caso, eso significa que no se interpondrá.」

「Espera, Caballero Azul. No tienes permitido marcharte sin la orden.」

「Si, ¿no es así como a sido hasta este día?」

 Escuchando las palabras del Caballero Negro y del Caballero Blanco que tenían la misma apariencia, el Caballero Azul quedo en silencio, pero una vez más comenzó a caminar.

「… El tiempo destinado está cerca. Seguramente hay una necesidad de revisar si hay algún defecto en el Castillo del Rey Demonio.」

「… Eso también es cierto. Caballero Azul, ¿podemos dejarte eso a ti?」

「Si y yo dejaré el deber de escoltar al Rey Demonio-sama a ustedes.」

 Diciendo eso, el Caballero Azul camino alrededor del interior del castillo.

 El Castillo del Rey Demonio.

 Un castillo flotante suspendido en la 『Brecha Dimensional』

 Una tierra donde nada podía ser creado.

 Flotando con una forma que permanecía sin cambio por un tiempo cercano a una eternidad, los cuarteles del Ejército del Rey Demonio.

 Y luego, estaba una fortaleza invencible que los simples humanos nunca podrían alcanzar.

 Sólo a aquellos quienes se postraban a su gloria se les permitiría residir en esa tierra.

「…」

 Observando a la ciudad del castillo desde la ventana, el Caballero Azul murmuró.

「… Es, es lo mismo de siempre.」

 Una silenciosa ciudad.

 Hecho con el mismo material misterioso del castillo, había un número diferente de edificios.

 Sin embargo, había edificios vacantes que no tenían a nadie viviendo en ellos.

 Solo había un camino principal donde los Alva iban y venían.

 Era lo mismo que lo habitual.

「… ¿Es, es realmente así, cómo era?」

 Repentinamente, esa clase de pensamientos pasaron a través de su cabeza, pero él inmediatamente lo dejo de lado.

「… No, desde luego que lo es.」

 Lo que llego a la mente del Caballero Azul en lugar de las dudas, era su deber en ese momento.

 Él haría una declaración de guerra en contra de la humanidad en un futuro cercano y se zambulliría en la guerra.

 Al destruir a la débil humanidad, establecerían un paraíso para los Mazoku en la superficie.

 Dibujando esa escena en su mente… El Caballero Azul una vez más llegó a otra duda.

「Sin embargo… ¿Por qué debemos simplemente esperar a que la humanidad se autodestruya?」

 Esa duda también se desvaneció.

 Dentro de la 『Brecha Dimensional』el Caballero Azul continuó preguntándose cosas de las que no tenía respuestas.

 Esas dudas fueron todas dejadas de lado, hasta ese momento.