VVC – Capítulo 084


Capítulo 84: Estoy lista para morir para preservar mi castidad


«También me tocaste…” La hermosa princesa continúo acusándola.

Gu Xijiu, «…” Ella sólo le había cubierto la boca y el cuchillo en su mano apenas toco su espalda.

La hermosa princesa estaba tan cerca de Gu Xijiu que ella pudo ver claramente sus densas pestañas en medio del vapor del agua.

Esa belleza parecía no ver el cuchillo en su cuello y se acercó otro poco a Gu Xijiu. Sus labios ligeramente curvados, «Yo, una princesa, he sido vista y tocada por un hombre. Por ello, he perdido mi castidad y estoy lista para morir para preservarla…», debería estar teniendo una expresión afligida, pero Gu Xijiu de cierta manera sintió que era fluida y elegante, encantadora y seductora. Se conmovió y su corazón endurecido se suavizó un poco.

Las mujeres de esa época continuaban siendo muy conservadoras. Esas grandes mujeres registradas en «Lie Nv Zhuan», amputaban su mano con determinación después de que un hombre las hubiera tocado involuntariamente.

‘Lie Nv Zhuan es un antiguo libro chino sobre las historias de mujeres famosas’.

Comparándolas, como esa princesa que había sido vista y tocada con relativa profundidad, ¡¿cometería suicidio para proteger su castidad?!

¡Sería una lástima si esa hermosa y elegante belleza muriera a causa de ese pequeño malentendido!

Raramente, Gu Xijiu sentía que había hecho algo malo y que debía tomar la iniciativa para remediar la situación.

Como estaba determinada, dijo, «¡soy una mujer!»

Los ojos de la hermosa princesa giraron para mirar su cuerpo y observaron fijamente el lugar principal donde se suponía que estarían sus pechos y dijo, «No puedo decirlo».

Su par de ojos llorosos se vieron desplazados por la joya de ojo de zorro en medio de su frente, aparentando ser incluso más encantadora.

Gu Xijiu se estaba sintiendo triste porque su pequeño cuerpo aún no había madurado, incluso cuando ella ya tenía trece años. Eso se debía al hecho de que no tuvo suficientes alimentos y nutrientes, por tanto, si uno miraba sólo su pecho, ella no era diferente de los muchachos.

«Mi cuerpo no se ha desarrollado adecuadamente…» Gu Xijiu explico, «Soy realmente una chica si no me crees…», ella hizo una pausa.

«¿Entonces?» La hermosa princesa cambió su enfoque a su rostro. Todavía había gotas de agua en sus pestañas mientras estas goteaban. Y la princesa continuó, «¿Cómo vas a probarlo?»

Si no podía probar que era una chica, esa hermosa princesa probablemente cometería suicidio. Sería un desperdicio de un buen regalo de Dios si esa hermosa dama falleciera ante ella…

Gu Xijiu no quería quitarse los pantalones para mostrarle.

Aún sintiendo determinación, Gu Xijiu tomó la mano de la princesa y la deslizó entre sus piernas tan rápido como un rayo antes de alzarla rápidamente, «Ahora, ¿me crees?»

Gu Xijiu estaba vistiendo pantalones lisos para poder moverse con facilidad, pero como estaba bajo el agua, sus pantalones se habían mojado y se habían pegado a su cuerpo. Por tanto, si realmente fuera un hombre, sus genitales se habrían sobresalido claramente, incluso si estuviera protegido por un par de pantaloncillos.

Sostuvo su mano y rápidamente pasó por su entrepierna nuevamente para poder sentir que no había nada fálico allí…

Naturalmente, podía probar que ella era una mujer.

La hermosa princesa probablemente no esperaba que fuera tan directa con sus acciones. Se sorprendió y la miró con escrutinio.

Sus ojos eran tan profundos como el mar y parecían incontables estrellas brillando bajo una tenue luz. Lucían tan hermosos, casi como los de los inmortales.

«No basta». La hermosa princesa escupió dos palabras y con una leve pausa, siguió, «Podrías ser un castrado». Su enfoque se detuvo nuevamente en el rostro de Gu Xijiu y dijo, «Tu rostro… tampoco se parece al de una mujer».

Gu Xijiu, «…»

Su rostro estaba cubierto con el disfraz pero lucía saludable con un brillo rojizo. Sus cejas eran largas y se extendían a sus sienes, mientras que su rostro no era nada parecido al de una delicada mujer, en cambio, era más similar a un hombre apuesto. ¡Ella sólo no tenía genitales masculinos!

Por eso la princesa pensaba que ella era un hombre castrado.