Capítulo 348: Mortales y Extraordinarias
Cuando Agatha despertó de nuevo, estaba sola en la habitación. Las gruesas cortinas estaban bien cerradas, haciendo la habitación extremadamente silenciosa.
Probablemente considerando el hecho de cual no estaba familiarizada, alguien coloco una vela al lado de la parte delantera de la cama, que estaba silenciosamente ardiendo con llamas naranjas.
Agatha giró la cabeza y la miró durante mucho tiempo, sólo para darse cuenta de que no había ni una sola gota de cera desbordando de las misma. La vela parecía arder para siempre sin ningún cambio de longitud.
“Puede ser causado por la magia”, pensó.
La colcha era tan suave que probablemente estaba hecha de algodón de alta calidad y llena de pelusa ligera y cálida. El trato era tan bueno como el de la Ciudad Santa de Taqila, lo que le hizo difícil a Agatha creer que podría haber camas y dormitorios tan cómodos en la Tierra Bárbara.
Movió sus dedos y descubrió que había recuperado la mayor parte de su fuerza física. Agatha se levantó de la cama. Manipulo su magia y el frío se desbordó de sus dedos de inmediato. “Parece que el príncipe no realizo ningún truco. Él eliminó la Piedra Represalia de Dios para darme un cierto grado de libertad.” Se acerco a la ventana y abrió un poco las cortinas. Estaba totalmente oscuro afuera. Las estrellas no se podían ver, también la luna. Toda la tierra parecía estar tragada por la oscuridad, con solo destellos nebuloso temblando a lo lejos. Podía oír el viento rugiendo al lado de la ventana, y ocasionalmente veía caer algo de nieve sobre el vidrio.
Parecía que se encontraban en el invierno, una buena temporada para el despertar de las brujas. En Taqila, ese tipo de veladas ni siquiera existían ya que toda la ciudad celebraba todos los días de invierno, las hogueras ardían durante todas las noches en la calle. Cuando ella miraba la ciudad desde la torre, parecía iluminada por bengalas brillando como estrellas, que simbolizaban la esperanza y un futuro prometedor. La gente oraba alrededor de las hogueras, ansiosos por reunir poder mágico y cruzar el mundo mortal. Cuando una bruja despertaba, el destino de su familia también cambiaba. Ya no necesitaban preocuparse por la comida o la ropa.
Agatha levantó el perno y abrió la ventana. El viento frío de repente entró en la habitación y alzo las cortinas. Las velas de la casa también fueron apagadas. La habitación se sumergió de repente en la oscuridad. Cuando sus ojos se adaptaron a los cambios de luz, pudo ver la tenue luz blanca reflejada de la nieve acumulada de los techos de la ciudad. “A juzgar por la silueta de los edificios, este lugar no es muy grande y es como dijo el príncipe es una ciudad fronteriza.”
La gente común sería congelada después de unas pocas horas si se quedara afuera en un clima tan frío. Pero Agatha no tenía miedo del frío ya que su cuerpo expulsaría automáticamente el más mínimo escalofrío que la hicera sentir incómoda. La última vez que sintió ese tipo de frío fue antes de despertar. Pero ahora, ella casi había olvidado el sentimiento.
La conversación anterior aun permanecía en la mente de Agatha mientras cerraba los ojos.
La Federación callo y las brujas se convirtieron en las secuaces del Demonio. Por lo tanto, los mortales estaban persiguiendo temerariamente a las brujas con la ayuda de las Piedras Represalias de Dios… Según el diario, Alice y Natalia huyeron con éxito de las llanuras fértiles. Pero como no lograron detener todo, la Federación estuvo condenada.
¿Qué diablos pasó en ese momento? ¿Por qué las dos Trascendentes fueron derrotadas por los mortales?
Ella no quería pensar sobre ello.
“¿No tienes frío?” alguien detrás de ella preguntó de repente.
Agatha se sorprendió. Dio media vuelta y observo a una chica sentada en la cama junto a la oscuridad. Su cara estaba completamente oculta en la noche. Ella era como un fantasma que aparecío en silencio. La puerta se encontraba cerrada, y Agatha no había escuchado ningún paso antes de que entrara.
“Si puedes cerrar la ventana, no me importaría volver a encender las vela”, dijo de nuevo.
No había duda de que la chica era una bruja.
Pero es tarde es medianoche. ¿Qué está tramando?
Agatha asintió sin decir alguna palabra. Cerró la ventana y en secreto dejó que un hielo fino pero duro cubriera su piel. La chica no hizo nada peligroso; en cambio, abrió el primer cajón de la mesita de noche del cual sacó un pedernal para encender la vela. A la luz de la vela, Agatha la vio. Tenía hermosos rizos dorados y unas cejas esbeltas que hacían que sus ojos parecieran muy afilados. Agatha no la había visto antes.
“Encantado de conocerte… Ups. Es la segunda vez que nos encontramos”, levantó los labios y dijo: “Mi nombre es Nightingale”.
“¿Quieres decir que… también te encontrabas escondida entre la multitud antes? ¿Es esta tu habilidad?” Agatha frunció el ceño y preguntó: “¿También tuviste un Gran Despertar?”
Incluso si ella era una de las honorables brujas que tuvieron un Gran Despertar, era descortés entrar sin llamar a la puerta.
“Ah, estás hablando de la evolución…” Nightingale negó con la cabeza. “No soy tan inteligente como Anna. Ella terminó el libro llamado ‘La teoría Bla bla bla Natural’ en poco tiempo. Siento que mi cabeza estalla una vez que veo esas fórmulas y teoremas. Tal vez no tenga la suerte de evolucionar en esta vida.”
Agatha estuvo distraída por un corto período de tiempo porque no podía entender la mitad de lo que la chica había dicho. Honestamente, ella no esperaba que “una Bruja Original” pudiera decir algo así. Además, según sus expresiones faciales, la chica no parecía haberse burlado deliberadamente.
“¿Es así como el príncipe llama al conocimiento?, En cuanto al libro que mencionaste, ¿puedo leerlo?”
“Por supuesto. Puedes leerlo siempre que te unas a la Unión de Brujas y seas leal a Su Alteza.” Ella se encogió de hombros.
“¿Servir a un mortal?” Agatha la miró y dijo en voz baja después de un rato: “Pensé que era lo suficientemente raro, pero tu estas más loca que yo.”
“¿Extraña? ¿Loca?” Nightingale inclinó la cabeza y preguntó: “¿Por qué dices eso?”
“En la Ciudad Santa de Taqila, la mayoría de las Brujas Despertadas solo trataban a las personas comunes y corrientes que no podían reunir magia como sirvientes humildes, personas inferiores o … herramientas de fertilidad.” Dijo lentamente, “pero no lo creo. Aunque eran estúpidos, no eran inútiles. Esa gente no era diferente de las brujas en muchos aspectos, siempre y cuando se les enseñara a aprender y pensar. Por eso, Mucha gente pensaba que yo era tan extraña por haber asignado a un mortal dentro de la torre. Sin embargo, no esperaba que estuvieras más loca que yo ya que eres leal a un mortal y recibes órdenes de él.”
“Su Alteza Roland no nos considera sirvientes”, Nightingale frunció el ceño y dijo: “No sé qué clase de extrañas ideas tienes sobre la palabra de lealtad, pero el hecho es que tomó a las brujas oprimidas por la Iglesia, nos dio un nuevo poder y vivimos juntos con sus súbditos en la Región Occidental. Estamos unidos para luchar contra la Iglesia y las bestias demoníacas, así como contra los diablos en el futuro.
“¡Pero ese modelo resultó ser un fracaso!” Agatha no pudo evitar alzar la voz. “Hace 400 años… para ti, podría ser hace 800 o 900 años, el mundo estaba gobernado por mortales y brujas. En ese momento, los seres humanos vivían casi en toda la región del amanecer. Sin embargo, cuando los diablos atacaron, sufrieron una derrota tan grande que solo logramos mantener las Llanuras Fértiles.”
“¿Oh?” Ella alzó las cejas. “¿Es eso cierto?”
“Dijiste que la historia había estado enterrada durante 400 o 500 años”, continuó Agatha, “según los registros de la Federación, la tercera Batalla de la Voluntad Divina está a punto de estallar muy pronto, ¡pero no tienen idea de los Diablos! La tierra bárbara es un mar de remolinos. Entonces, ¿dónde más pueden refugiarse? ¡Solo reconstruyendo la Federación, y uniendo a las brujas y mejorando la probabilidad de que haya Grandes Despertares con conocimiento, podremos aprovechar la última oportunidad para detener el ataque de los diablos!
“¿Por qué dices eso?”
“¿Qué quieres decir?”
“Han pasado 400 años, ¿verdad? Muchas cosas podrían haber cambiado durante tanto tiempo. Pero ¿por qué sigues atada por esas viejas ideas?” Nightingale suspiró.” Su Alteza dijo que los mortales podían derrotar a los diablos cuando salió. También oíste eso. Él también está uniendo a todas las personas, incluidas las brujas. Él quiere unir a cada persona común en el continente, porque me dijo que la gente de todo el país es el grupo más poderoso.”
“Tierra Barbara..” Agatha estaba a punto de refutar esa tontería cuando de repente se detuvo y dijo. “Pareces tan segura de conocer el resultado de la batalla por adelantado. ¿Podrían 400 años realmente cambiar todo? ¿Ese príncipe de cabello gris realmente tiene la capacidad increíble de permitir que los mortales tengan el mismo poder que las brujas?”
“Parece que te has dado cuenta de ello,” Nightingale sonrió y dijo, “Todavía tenemos mucho tiempo, entonces ¿por qué no abres tu corazón y ves todo con tus propios ojos?
Esta vez, Agatha se quedó en silencio por un largo tiempo. “… Puedo ver que no me quieres.”
Nightingale no respondió.
“Las brujas de la Federación solían verme así también, después de que se enteraran que había designado a un grupo de mortales como asistentes experimentales en la torre”, dijo. “Obviamente, no me quieres, pero ¿por qué me dices esto?”
“No te odio siempre que dejes de ser tan altanera y trates a Su Alteza normalmente. En cuanto a tu pregunta…” hizo una pausa y continuó, “porque el príncipe dijo que no quería verte abandonada por el tiempos.”