Capítulo 323: Ministerio de Seguridad Pública
Roland ya tenía un plan aproximado del futuro sistema de seguridad pública para su territorio.
En la actualidad, la ciudad tenía una población de unos veinte mil habitantes. Además de las personas locales, también había personas que habían inmigrado desde la Fortaleza Longsong, así como refugiados que escaparon de la Región Oriental. Para cuando los mensajeros enviados por Barov regresaran, era posible que regresaran con personas de la región norte o sur del reino y, como resultado, complicarían aún más las culturas en las que se basa la población. Con todas las diferencias morales, los conflictos como los que sucedieron el día de hoy se volverían cada vez más comunes.
Por lo tanto, necesitaría establecer un sistema de seguridad pública para separar la tarea del Primer Ejército de patrullar la violencia interna y externa. Ya había pensado en ese asunto antes, pero no había pensado en nada definitivo debido a la poca cantidad de personal que tenía. Sin embargo, ahora que el Primer Ejército se encontraba luchando contra las bestias demoníacas y la población estaba aumentando exponencialmente, había llegado el momento de implementar su plan.
Al formular e interpretar las leyes por sí mismo y llevar a cabo juicios por crímenes mayores, él sería la primera y también la última instancia; la seguridad pública capturaría a los delincuentes de acuerdo con la ley y al mismo tiempo resolvería disputas civiles. La Oficina de Seguridad sería responsable de mantener el sistema inmune y de prevenir eficazmente la corrupción de los sistemas, además de utilizar personal de seguridad pública para llevar a cabo las operaciones de limpieza de la corrupción y ahorrar recursos humanos. Todo eso era el esquema para el sistema de seguridad de Roland.
La situación ideal sería si primero intentar ejecutar el sistema de seguridad en Ciudad Fronteriza, para cuando Ciudad Fronteriza se estableciera como una gran ciudad el próximo año, expandiera todo el sistema a todo el territorio occidental.
Para entonces, sin importar si se trate del territorio de un Señor autónomo o no, todos tendrían que implementar el mismo conjunto de leyes y aceptar la regla como un conjunto unificado. Y solo él sería capaz de mantenerse por encima de la ley.
Como el más poderoso noble del Territorio Occidental, Roland sabía que no era realista decir que todos eran iguales ante la ley, ni podía abolir la aristocracia. Pero al menos podría asegurarse de que el sistema tradicional de feudalismo ya no existiera dentro de su ciudad. Si quisieran obtener la protección del territorio occidental, tendrían que ceder su poder de autogobierno.
En cuanto al jefe del Ministerio de Seguridad Pública, Roland ya tenía a la persona adecuada en mente para el cargo.
Alguien lleno de un fuerte sentido de la justicia y al mismo tiempo sin ser pedante, Carter Lannis sería una elección adecuada.
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Cuando Vader regresó a su residencia temporal, el anciano Kukasim salió a darle la bienvenida.
“Tu… no importa.”
“Es tolerable”, gruño Vader, “Su Alteza solo me sentenció con un castigo de diez látigazos.”
“Déjame echar un vistazo”, Kukasim se adelantó ansiosamente.
“Vuelve a dentro de la casa”, dijo Vader mientras entraba a la casa donde el calor que se encontraba en su interior disipo inmediatamente el frio que había en su cuerpo. Cuando la puerta se cerró, parecía como si el interior y el exterior fueran dos mundos completamente diferentes. Comparado con los cobertizos de madera de antes que dejaban pasar el viento y la lluvia, esa casa de barro, algo baja y estrecha daba a las personas una sensación de comodidad.
Así es, los lugareños parecían llamar a esa casa ‘Cueva Cavernícola’.
El anciano lo dejó acostarse en el kang, y cuando alzo la ropa de la espalda de Vander, no pudo evitar aspirar una bocanada de aire frío.
“Tu espalda está cubierta de sangre, ire a buscar ceniza para cubrirla.”
“Espera, no hay necesidad. Solo queda sangre seca después de la tortura, la sangre ya ha dejado de fluir hace mucho tiempo.” Tuvo que hacer pausas varias veces mientras hablaba, “El caballero dijo que era mejor mantenerla abierta y esperara dos o tres días para que la herida sane.”
“¿Dos o tres días?” Kukasim sacudió su cabeza con miedo, “No, hijo, para entonces es posible que tengas una fiebre muy alta y tu espalda hinchada como una bola. Incluso si tienes un cuerpo fuerte, necesitarás al menos una semana para recuperarte. Tú, de todas las personas, deberías estar al tanto de lo que sucede cuando una enfermedad brota.”
“Puede que no lo creas,” se lamió los labios secos. “Pero no siento mucho dolor por las heridas en mi espalda. Por el contrario, siento una sensación de frescura y ardor, es una señal de que se está curando. Después de que terminaron los latigazos, salpicaron un cubo de agua en mi espalda…”
“¿Agua salada?” El anciano frunció el ceño.
“Al principio, tuve el mismo pensamiento, pero el ardor que esperaba no llegó”, Vader se rió dos veces, “El Caballero que realizo la acción dijo que con eso podría eliminar a todos los microorganismos causantes de enfermedades. Si quiero que mis heridas cicatricen rápidamente, no debería hacer nada superfluo con él y dejarlo secar.”
“¿Qué son esas enfermedades que causan esos micro…organismos?”
“Microorganismo”, frunció los labios, “Quién sabe qué son, probablemente sean algo relacionado con esas brujas.”
El anciano bajó la cabeza, y luego de un largo tiempo abrió la boca de nuevo: “No deberías haber dado un paso adelante por mi culpa, si solo son palabras, es soportable…”
“Si tuviéramos que soportarlo, tendríamos que sufrir bajo un tratamiento aún más severo. Conozco a ese tipo de personas, tienen la moral y la apariencia similares a muchos de los nobles que viven en Ciudad del Rey “, blasfemo Vader. “He oído que en esta área la nieve durará varios meses, pero el dinero que tenemos no durará hasta entonces.” Hizo una pausa, “y… también deliberadamente elegí ese momento para golpearlo.”
“¿Deliberadamente lo hiciste?”, Preguntó Kukasim con incredulidad.
“Sí. Después de todo, el Príncipe siempre aparece por el lado oeste de la muralla de la ciudad a esa hora del día. Como él había prometido darnos comida gratis, debe odiar ese tipo de comportamiento que está dañando su reputación. Por lo tanto, también era la forma más efectiva. Si simplemente hubiéramos provocado una simple pelea, es probable que no hubiese llegado a los oídos de su Alteza. Después de todo, Kohya Harvie podría haber recibido instrucciones de otros. Entonces, si alguno de los oficiales del Ayuntamiento quisiera suprimir las noticias sobre esto, carecería de sentido sin importar lo que dijéramos.”
“Pero también pudo haber sido instruido por Su Alteza…”
“La posibilidad de que ese fuera el caso era escaza. Si Su Alteza Real quisiera ahorrar su dinero, entonces las tres comidas que prometió se reducirían a dos comidas. Además, he preguntado de él con anticipo y no importa si son los residentes locales o esos siervos, todos ellos alaban la amabilidad y sabiduría de Su Alteza”, dijo Vader, sonriendo con orgullo. “Verás, yo no estaba apostando ni nada de eso, ¿verdad?”
“Con que eso era… originalmente”, suspiró aliviado el anciano, “Parece que realmente consideraste todo.”
Pero también había una parte que no había adivinado, pensó Vader, ese fue el castigo.
Trabajando durante diez años como oficial de patrulla en Valencia, tenía una comprensión profunda de la fealdad que se encontraba oculta bajo la apariencia glamorosa de la ciudad. Había más de una docena de nobles que utilizaban su poder para chantajear, incluso a las personas de entre las filas de las patrullas. Por lo tanto, no había mucha necesidad de que él quisiera castigar a esos nobles.
La reacción de Su Alteza Real había sido básicamente la misma que había esperado, solo que la cantidad de castigo estaba más allá de lo esperado.
En ese tipo de circunstancias, los Señores que se preocupan por su reputación habrían dictaminado al supresor como la parte inocente, pero él en cambio había castigado a todos. Parecía que Su Alteza se preocupaba más por el sistema que por su reputación.
Para un Señor, acostumbrado a hacer lo que le gustaba sin preocuparse tanto por sus súbditos, era algo que raramente se veía.
“¿Qué vas a hacer ahora?”, Preguntó el anciano después de un momento de silencio.
“Descansare durante dos días, como el Caballero dijo, y luego continuare como antes y ayudare a esos tipos que llevan esas extrañas armas y les entregare los vivieres.”
“Podrías haber tenido una vida decente junto con los artesanos en el centro de la ciudad.”
“Pero sería imposible que entres, Kukasim. Entonces, deja de hablar sobre ello,” dijo Vader, sacudiendo la cabeza. “Me niego a dejarte atrás.”
Ese anciano no era ni su familia ni su abuelo. Hace medio año, había sido un prisionero mantenido en prisión. Todo el mundo sabía que las ratas negras de la calle habían empujado al anciano para que actuara como chivo expiatorio, pero ese asunto aparecía con demasiada frecuencia como para que la patrulla se volviera perezosa para darse cuenta de ello. Más tarde, cuando un grupo de piratas saquearon Valencia, Vader había creído que moriría dentro de la confusión, pero en ese momento crítico, el anciano escondido dentro de la prisión lo cubrio con sus sábanas malolientes que al final le permitieron afortunadamente escapar.
Vader no esperaba que fuera salvado por uno de esos prisioneros a los que normalmente no quería mirar. Pero en ese momento finalmente había llegado a comprender que no había ninguna diferencia esencial entre cómo actuaban y esa nobleza repugnante.
Las otras dos personas en la sala eran conscientes de la identidad de Kukasim, pero desde que lo estaba cuidando no se atrevieron a tocarlo. Sin embargo, en caso de que se fuera, seguramente tratarían de crear problemas para el anciano.
“No te preocupes, todo estará bien.” Vader palmeó los hombros de su homólogo.
Dos días más tarde, se entero de que Su Alteza estaba reclutando personal para los cargos de seguridad pública.