Capítulo 112: Batalla en Eagle City (3)
Parecía como si los caballeros del rey estuvieran sosteniendo una hoja de plata afilada cuando cortaron en la parte trasera de las tropas de retirada de García.
La multitud estalló en el caos y mucha gente cayó al suelo mientras trataba de huir, sólo para terminar siendo pisoteado hasta la muerte por los caballos.
Ocasionalmente algunos de ellos sacaban armas e intentaban resistir a los atacantes, pero contra los caballeros superiores pronto fueron cortados en pedazos. Liderando esta clase de inundación imparable, fue hecha por un caballero de la élite del campo en el borde frío del viento. El Caballero Neiman fue quien sirvió como punta de lanza de este ataque. Por otra parte, su capa azul, que bailaba en el viento detrás de él fue particularmente llamativa, donde quiera que fuera, el enemigo trataría de huir. Cada vez después que su espada cortara, estaría cubierta en sangre.
Timothy Wimbledon en su lugar se situó a la distancia en una pequeña colina, con vistas a todo el campo de batalla. En este punto, las tres mil personas de las tropas de García ya no eran capaces de mantener unida su formación, en cambio, con cada segundo que transcurría estaban cayendo cada vez más y más, lo que los llevó a detener casi por completo su marcha.
Ellos no van a durar mucho más tiempo, pensó Timothy, en el momento en el que el segundo de mis tres equipos ataque se derrumbaran. Estas personas simplemente no pueden resistir el asalto de los caballeros de élite de mi reino Graycastle. La mayoría de ellos ni siquiera están utilizando alguna armadura, en el momento en que una hoja afilada se acerca a ellos, inmediatamente comienzan a perder su voluntad de pelear.
Todo ocurrió casi exactamente como había esperado, después de pasar una hora dentro de Eagle City, se habían regresado, para cabalgar por un bosque escaso, llegando finalmente a la carretera. De regreso en la carretera, Timothy ordenó a sus caballeros que comenzaran a correr, y finalmente después de una hora más tarde, fueron capaces de ponerse al día con García.
De acuerdo con el consejo del Duke Frances, Timothy dividió su tropa en tres equipos de aproximadamente trescientos caballeros, y dejó que ellos se turnaran para atacar, por diferentes lados al enemigo. De esta manera, él fue capaz de mantener algunas tropas y estar siempre dispuesto a enviar refuerzos cuando fuera necesario. Con el fin de evitar la posibilidad de que pudieran ser rodeados, a sus caballeros se les prohibió atacar el centro de la formación del enemigo y en su lugar debieron atacar sus flancos. Con ataques cortos rápidos, que sólo cortan los restos, con cada carga matando a decenas de personas.
Esta táctica obviamente tuvo mucho éxito, después de algunos cuantos ataques el enemigo ya tenía más de un centenar de víctimas, sin dejarlos incluso ser capaz de tomar represalias. Trataron de organizar un contraataque con su propia caballería, pero la brecha entre su equipo y la clase de entrenamiento que recibieron era demasiado. En comparación con los caballeros del Rey, su grupo de retraso no fue nada más que un par de infanterías montando caballos. En el momento en que se encontraron cara a cara, la “caballería” hecha de hombres que habían sido lo suficientemente valiente como para cargar a la batalla fueron simplemente matados, y algunos con suerte fueron capaces de dispersarse en todas direcciones.
Esta matanza unilateral fue un gran golpe para la moral del enemigo, y pronto Timothy se dio cuenta que algunas de las tropas de García comenzaron a separarse de la formación, huyendo en todas direcciones.
Finalmente ha llegado el momento de poner en marcha nuestra ofensiva principal, pensó. Cuando el Caballero Viento Frio regresó de dirigir el ataque de sus tropas, Timothy no le ordeno iniciar la siguiente ronda de tácticas de combate, en cambio, le indicó que se acercara a su lado.
“Su Majestad, su formación pronto se desmoronará.” Neiman se limpió el sudor de la frente de, dejando algunas marcas sangrientas en su cara cuando se limpió, naturalmente, era la sangre de sus enemigos, hasta ahora no había recibido ninguna lesión durante toda la batalla.
Al ver esto, Timothy se quitó su propio pañuelo y se lo entregó. “Bien hecho, puedes tomar un descanso ahora, finalmente es el momento de dar el golpe mortal.”
Al ver que la próxima ronda de ataque no siguió, las tropas de García también se dieron cuenta de que el momento decisivo se acercaba. Su gran grupo detuvo por completo su marcha, y se reunieron con prisa, hasta que lograron formar una estrecha formación. Cada soldado en la parte exterior sostuvo una pica de madera en una altura alta, esperando el impacto.
Descubriendo esto, Timothy solo se burló. En sus ojos esto no era nada más que la última lucha de un hombre que ya estaba destinado a morir. Sin barricadas, ni armadura, ¿Sólo con su propia carne y sangre piensan resistir el poderoso impacto de mis caballeros? Esto sólo puede terminar en un desastre para ustedes. No importa qué cartas les haya dejado mi querida hermana menor, no podrán cambiar el resultado. Naturalmente, también podría ser cierto que ya se ha marchado desde hace mucho tiempo, dejando a este grupo aquí para morir y comprar tiempo para que haya podido huir.
Pero pronto se dio cuenta que estaba equivocado.
Dentro de la muchedumbre, volvieron a alzar una vez más la bandera de la Reina de Clearwater. Al ver esta bandera verde con el barco de vela y la corona ondeando en el viento, Timothy frunció el ceño. Así que tomo sus binoculares y para tomar un vistazo más de cerca al enemigo. Pronto descubrió que detrás de los guerreros que habían levantado la bandera estaba de pie la figura borrosa de una mujer que parecía estar gritando algunas órdenes. Aunque no podía ver claramente el rostro de la persona, su pelo gris que se encontraba fluyendo en el viento le dio su identidad.
García Wimbledon, no había huido.
Timothy tomó una respiración profunda, así, que esto significa que esta farsa llegará a su fin aquí. Yo no tengo que seguirla al Puerto de Clearwater.
Después de esperar a que los caballos estuvieran los suficientemente descansados, el nuevo rey dio la señal para iniciar el ataque principal.
La caballería formada a partir de los caballeros y escuderos era más o menos de unos ochocientos y bajo el liderazgo del propio caballero del rey, comenzaron su ataque contra el enemigo. Una vez más el caballero Viento frio estaba liderando el ataque, Neiman Moor.
Justo en el momento en el que el ataque finalmente golpearía al enemigo, en ambos lados del horizonte, de repente un enorme número de soldados apareció. Después de lanzar extraños gritos de guerra, inmediatamente comenzaron a precipitarse en la dirección de la batalla.
Timothy no podía creer lo que sus ojos le estaban mostrando.
Sin levantar ninguna bandera o usar cualquier emblema, las tropas que de repente aparecieron no se parecían a ninguna fuerza conocida del reino. Después de una observación más cercana, Timothy miro que todos estaban usando armaduras y armas diferentes. Pero con su alta estatura y caras extrañas, Timothy sabía, que no sólo eran de un solo lugar.
¡La gente de la arena del extremo sur!
No necesitaba adivinar si eran amigos o enemigos, sin duda, García fue capaz de hacer un trato con ellos. Que lleva este grupo de malditos extranjeros en el Reino de Graycastle. Liderando este grupo de malditos extranjeros al Reino de Graycastle. Sólo el significado de este pensamiento hizo que Timothy ardiera de rabia, e inmediatamente gritó: “¡Dé la señal, no sigan atacando!”
Pero ya era demasiado tarde, una de alta velocidad, era imposible detener con tan poco tiempo. Sus caballeros se empalaron directamente en el corazón de las tropas de García, cortándoles como un cuchillo caliente a través de la mantequilla, con un solo objetivo, llegar a la Reina de Clearwater.
Timothy miro ansiosamente hacia la dirección de la bandera que estaba izada, con la esperanza de que se rompería – las tropas de la gente de arena, que venían de ambos lados eran cada uno alrededor de mil hombres fuertes, haciendo que las fuerzas de pelea de García alcanzaran las 5mil tropas. Este era una cantidad que Timothy era incapaz de afrontar. Por otra parte, la gente de la arena tenía una estructura fuerte y siempre estaban en guerra los unos contra otros, convirtiéndoles en una gran amenaza incluso para sus caballeros. Sólo matando al líder enemigo, cortando su bandera y rompiendo las fuerzas de García, tendría todavía una oportunidad de ganar.
Sin embargo, aún así, el asta de la bandera se balanceó un poco, pero seguía firme.
Por último, la gente de la arena fue capaz de cerrar el círculo, bloqueando la última salida de sus caballeros, comenzando así a unirse a la batalla.
Sin estos refuerzos, los tres mil guerreros de García habrían sido derrotado hace mucho tiempo. Pero por el momento seguían persistiendo, y como un pantano, tragarse un caballero tras otro.
Al oír los cuernos soplando en señal de retirada, los caballeros que estaban más cerca del borde trataron de liberarse, para precipitarse de nuevo con el rey. Pero muchos de ellos se habían metido en las fuerzas del enemigo y ahora estaban atrapados, incluido el Caballero Viento Frío.
Él se encontraba luchando con un guerrero de la gente de la arena de nueve pies de alto, estaba respirando pesadamente. La otra persona estaba moviendo un palo de madera, abriendo espacio para su lucha de dos hombres. Pero por desgracia, la montura de Neiman ya había sido aplastada hasta la muerte, y sólo gracias a su extraordinaria reacción y agilidad fue capaz de mantenerse con vida. Pero sin una montura, y con su armadura pesada ya había consumido rápidamente la mayor parte de su fuerza física. cuando dio un paso de lado una vez más tratando de esquivar, su pie resbaló y fue golpeado por el palo en la mitad de su pecho. La fuerza del ataque que golpeó contra su armadura fue tan grande que se rompió en dos pedazos.
Su capa azul se balanceó una vez más a través del viento antes de que finalmente desapareciera entre la multitud.
Media hora más tarde, los caballeros que seguían luchando eran cada vez menos, y cuando la gente de la arena miro hacia la colina Timothy no pudo hacer nada más que, apretarse los dientes y ordenar la retirada. Todo su grupo de personas comenzó su retirada hacia el norte. En comparación con la enorme fuerza que había llevado previamente a la batalla, el nuevo rey ahora sólo tenía trescientas personas todavía a su alrededor.
