Capítulo 176: Incluso si soy un fantasma… (1)
«¿Qué dijiste?»
La expresión de Xiao Tian Yu se oscureció, y un destello de intención asesina apareció en su hermoso rostro mientras dirige su mirada hacia la enloquecida Mu Yi Xue con una sonrisa despiadada.
Levantó su mano ligeramente… Y, en un abrir y cerrar de ojos, un viento cortante se levantó y golpeó a Mu Yi Xue, siendo enviada a volar hacia atrás hasta que se estrelló contra una pared. Su sangre brotó en ese instante desde la parte posterior de su cabeza.
Un jade apareció en la mano de Xiao Tian Yu.
Era el jade que simbolizaba al Joven Jefe de la Familia Xiao.
Miró con frialdad a la pálida Mu Yi Xue con la misma intención asesina en su rostro y dijo: «Mira esto con atención, porque no somos impostores de la Familia Xiao. Nosotros, la Familia Xiao, no nos hacemos pasar por otros; sin embargo, hay alguien más que se ha hecho pasar por un salvavidas…»
Xiao Tian Yu volvió la cabeza hacia Mu Ting Er y noto que su cuerpo se estremecía.
«Es una pena que el jefe de la Familia Mu no fuera consciente todo durante todos estos años. Después de todo, si no fuera por haber buscado a nuestra hija, no habríamos investigado estos asuntos, pero ese supuesto salvavidas del pasado era simplemente alguien que había creado un escenario y actuado en consecuencia para darle a su hija un buen futuro.»
Los labios del hombre se curvaron en una sonrisa, pero el cuerpo de Mu Ting Er se estremeció aún más.
Una intensa sensación de miedo impregnaba su corazón…
El cuerpo de Mu Qing se puso rígido cuando miró con incredulidad a la hija que tanto había adorado durante tantos años. «Mu Ting Er, ¿qué está pasando?»
Apretó los dientes cuando su voz se llenó de un odio intenso.
De hecho, Mu Qing había hecho cosas que no eran buenas, pero era un hijo filial que respetaba y amaba a su madre desde el fondo de su corazón… Una vez, hace dieciséis años, ellos fueron a un viaje para observar el paisaje y se encontraron con bandidos de montaña, y si no fuera por la ayuda del padre de sangre de Mu Ting Er, su madre habría muerto en esa situación.
Fue precisamente debido a esto que había adorado y amado tanto a Ting Er.
También fue debido a este incidente que después de que su madre regresara a la mansión, su mentalidad se volvió inestable debido al exceso de miedo, sosteniendo esa situación durante dos años antes de fallecer.
¿Quién podría adivinar que todo eso fue tan solo el acto de Mu Ting Er?.
Era ridículo que por una hija así había abandonado a Mu Ru Yue y, junto a ella, la oportunidad de asociarse con la Familia Xiao del Dominio Sheng, ¿cómo no podía odiarla?.
«Mu Ting Er, ¡dame una explicación!»
Mu Qing apretó los puños con fuerza mientras la vena de su sien resaltaba un poco.
«Padre.» El cuerpo de Mu Ting Er se estremeció antes de morderse el labio y mirar con ojos llorosos a Mu Qing. «Padre, no lo hice. Realmente no lo hice, esto es…»
«¿Estás tratando de decir que la Familia Xiao está mintiendo, o no ha investigado como se debe?»
Una sonrisa burlona apareció en la cara de Mu Qing, para decir con una mirada llena de odio «¡La Familia Xiao no es tan simple como crees! No necesitan decir esta clase de mentira, ni investigarían erróneamente… Mu Ting Er, todo es por ti, esta perra tiene la culpa de la caída de mi Familia Mu.»
Esto era correcto, todo se debía a esta perra.
Si no fuera por ella, Mu Ru Yue ya se habría casado con Ye Tian Feng y no lo odiaría hasta los huesos, y la Familia Xiao también le habría agradecido por ayudarlos a criar a su hija durante dieciséis años.
Pero ahora, ¡todo se arruinó debido a Mu Ting Er!
¡Pa!
Una mano aterrizó con violencia en el rostro amarillento y delgado de Mu Ting Er, pero la rabia de Mu Qing no disminuyó, así que levantó la pierna y la pateó un par de veces, como si con ello estuviera aliviando su ira contra ella.
La lamentable Mu Ting Er no tenía ninguna posibilidad de luchar, siendo lo único que podía hacer el apretar los dientes y soportar la paliza de Mu Qing.
Ella no ganó legítimamente su identidad como la Joven Maestra de la Familia Mu, así que ¿tenía que devolver tal titulo hoy? Ella no podría soportarlo, y mucho menos que Mu Ru Yue resurgiera para convertirse en la hija de Madam Sheng Yue, mientras que ella tenía que sufrir tal maltrato.