Capítulo 39 – Capítulo 39 – La Muerte del Árbol Demoníaco Dorado

Después de la primera explosión, ocurrió otra medio minuto después.

Después de que Brendel escuchara la explosión, confirmo que el Gusano de Roca efectivamente había cruzado el valle y se dirigía hacia el Jardín Prohibido. Esa criatura que estaba revestida con una armadura de roca y tenía incontables dientes en forma de aguja, el interior de su boca parecía un remolino. Fácilmente atravesaba el suelo y las rocas más duras.

Había visto un Gusano de Tierra en el juego antes. Tenía treinta metros de largo y al menos 3 personas tenían que rodear-lo para atacarlo. La defensa de la criatura era asombrosamente alta, incluso la Espada Vran de 40 OZ no era capaz de atravesar su armadura rocosa y hacerle daño.

[Maldición. Solo fueron dos sonidos, si el Gusano de Roca se desvía un poco, su atención regresara a nosotros.]

Las raíces del Árbol Demoníaco Dorado en el jardín prohibido se extendían casi un kilómetro y, teniendo en cuenta la velocidad máxima del Gusano de Tierra, Brendel calculó que al menos necesitaría dos minutos y treinta segundos para salir del terreno.

[Estamos casi en el centro del Jardín Prohibido. Una vez que terminemos de pasar este terreno desigual, podremos alcanzar el cuerpo principal del Árbol Demoníaco Dorado. Si este Boss no nos presta atención con, sería lo mejor.]

Quedan dos minutos.

Pero dentro de su interior sabia que el Árbol Demoníaco Dorado definitivamente intentaría detenerlos. Antes de que terminara sus pensamientos, escucho crujidos provenientes del suelo. Se escucharón tan cerca del Árbol Demoníaco Dorado que sus acciones llegaron sin previo aviso, y Romaine no pudo advertirles a tiempo.

Los tres sintieron como la tierra se hundía ante ellos. Brendel quien estaba previamente preparado, apuñaló el suelo con la espada élfica para sostenerse, mientras que su otra mano evitó que la chica comerciante cayera. Cuando miró hacia los lados, Freya estaba medio arrodillada en el suelo mientras trataba de mantenerse firme.

Antes de que los tres tuvieran la oportunidad de relajarse, el suelo se hundió una vez más y una grieta visible apareció una vez mas.

«¿Qué está tratando de hacer?» Freya casi cayó hacia atrás y preguntó con inquietud.

«Está tratando de matarnos, concéntrate y sígueme.» Levantó a Romaine del suelo, y retiro la espada que posteriormente envaino. Cargo a la joven comerciante con sus brazos y saltó sobre la grieta causada por las raíces.

La cara de Romaine se puso de un rojo manzana cuando observo que era cargada, y sus ojos se abrieron cómicamente-

Freya también quería saltar, pero el Árbol Demoníaco Dorado ya había preparado el ataque. Las raíces emergieron del suelo y la golpearon en el pecho. Si no hubiera sido por las rápidas reacciones de Brendel para detenerla, ella habría caído en la grieta junto con las rocas y el barro.

«Gracias.» Freya se encogió de hombros y le dio las gracias.

«Ahora no es el momento de agradecerme.» Brendel sacó su espada y cortó un látigo de las enredaderas entrantes en dos. «Adelante. Estamos casi en el árbol.»

Enredaderas en forma de serpiente aparecieron frente a ellos cuando finalmente llegaron al BOSS. La grieta detrás de ellos se estaba haciendo cada vez más grande, pero Brendel estaba acostumbrado a esa escena.

[Puede que me hayas dado una sorpresa en el primer nivel, pero parece que te has quedado sin trucos].

«¡Mira cuidadosamente!»

Le gritó a Freya mientras sostenía con fuerza a Romaine. Observó las enredaderas con cuidado, dejando que el «látigo» pasara, y luego lo agarró con fuerza.

El Árbol Demoníaco Dorado aparentemente no esperaba eso. Y sacudió la enredadera de un lado a otro, tratando de deshacerse de Brendel.

Pero el joven se aferró firmemente a él con un brazo. Tanto Romaine como él se movieron de arriba, abajo mientras la enredadera se sacudía, pero su intento fue inútil. El BOSS finalmente se puso impaciente y levantó la enredadera, ganando impulso, logró arrojarlos. Sin embargo, Brendel utilizó el impulso y aterrizó a treinta metros de la grieta de forma segura.

Sus altas estadísticas de fuerza le permitían poseer cuatro veces la fuerza de un humano normal, mientras que su ágil agilidad le permitió manejar los movimientos repentinos del árbol, y su robusto físico le permitió absorber el impacto. Si se tratara de una persona normal, sus órganos internos se habrían roto debido al aterrizaje, pero Brendel solo se sintió un poco inutilizado con la sensación cuando aterrizó.

Esa era la ventaja de tener estadísticas altas, y sabía que todo lo que hizo tuvo sentido cuando aterrizó de manera segura

Inmediatamente le gritó a Freya: «¡Sígueme!»

Tiro de la Joven Comerciante sin parar, y se dirigió al Árbol Demoníaco Dorado.

«Brendel, espera, no puedo alcanzarlos.»

No escucho lo que le dijo la Joven comerciante, ya que el suelo se agrieto repentinamente frente a él con un sonido estrepitoso. Numerosas enredaderas brotaron para formar una red, y así cubrir al Árbol Demoníaco Dorado.

[¡Mierda! Queda menos de un minuto.]

Brendel hizo una pausa por un momento, mientras que Romaine jadeaba detrás de él. Ella miró el árbol frente a ella; no importaba cómo lo mirara, su apariencia parecía un Manzano Dorado hecho por los dioses.

Pronto recordó las características del árbol en la web. Parecía ser idéntico al juego.

Las incontables enredaderas se movieron, antes de atacarlo al mismo tiempo.

Con un rugido, Brendel desencadenó sus ataques sin reservas, la espada élfica brilló con un fuego plateado fantasmal a una velocidad deslumbrante. Cada una de sus estocadas cortaron con precisión las numerosas enredaderas que lo atacaban continuamente. A su vez estallaron en llamas y se convirtieron en cenizas. Posteriormente liberó a Romaine y dio un paso atrás, levantando su espada con ambas manos:

«¡Limite Fuera!»

Un paso adelante.

Brendel sintió una fuerza abrumadora extendiéndose desde sus hombros hasta sus brazos y manos. Cortó la telaraña frente a él con un hermoso arco plateado. La hoja pareció comprimir el aire, y pronto una explosión de viento se escucho por atrás. La red de enredaderas desbordadas se rompió como un mar de leña podrida.

Freya se tambaleó por el terreno irregular y corrió hacia el árbol desde atrás, donde logró ver esa escena frente a ella. Siempre pensó que había visto sus límites cada vez que estaba en acción, pero era la primera vez que lo veía usando ese poder explosivo.

El Árbol Demoníaco Dorado no pudo bloquearlos más y solo pudo verlos irrumpir en el corazón del jardín.

«Las dos ataquen el tronco y las raíces, yo atacaré el cuerpo principal»

Sacó la Tarjeta del Destino y habló en su corazón: «¡Activar, Espada Sagrada!»

********************************

Incluso en el verano, la Fortaleza de la Garra de Plata todavía estaba cubierta por una capa de escarcha. Fue construido en las montañas de Corcov para supervisar a los salvajes en el bosque. Pero después de que se construyó la provincia de Balta, se utilizó como una de las villas de la familia real.

Había un pino antiguo en el jardín en forma de diamante de la fortaleza. Había sobrevivido milagrosamente de un incendio dentro de la Fortaleza de la Garra de Plata, y el propietario pensó que era un buen augurio. Por lo tanto, el árbol se mantuvo después de que la fortaleza fuera reconstruida.

Y debajo de ese pino, una atmósfera solemne se extendía desde allí.

Una adolescente estaba parada allí con un grueso uniforme de caballero. Tenía un hermoso cabello plateado, y sus orejas medio puntiagudas demostraron que tenía otra línea de sangre más allá de un ser humano, pero no tenía la elegancia y la belleza distante de un elfo.

La niña de quince años tenía un rostro sombrío, y estaba agarrando fuertemente una espada larga negra y pesada con ambas manos. Su postura adoptó la forma de la postura defensiva de un caballero de Aouine.

Ella apretó los labios con fuerza, ordenando al niño más joven que estaba frente a él: «¡Haruze, atacame!».

«Hermana mayor …»

«¡Atacame!»

El joven solo pudo obligad amente atacarla. Pero la chica paró limpiamente su espada y empujó su pecho con una mano, haciéndolo caer directamente al suelo.

Los sirvientes de los alrededores respiraron audiblemente hacia adentro.

«¡Otra vez!» La expresión de la niña no cambió mientras hablaba.

«Hermana, yo…»

«Ponte de pie, otra vez».

El chico solo podía ponerse de pie. Dio un paso atrás, antes de apretar los dientes y cargar nuevamente. Pero la chica con el uniforme de caballero pasó la espada de su mano derecha a la izquierda y simplemente se balanceó hacia arriba, derribando fácilmente la espada de su oponente.

«¿Por qué te distraes?»

«Lo siento.»

«De nuevo.»

********************************************

Diez minutos tarde.

La niña estaba en el vestidor. Permitió que dos sirvientas retiraran su pesado uniforme. Su sudor y aire caliente se veían visiblemente en el aire frío. Ella no giro la cabeza y simplemente preguntó: «¿Dónde está mi padre?»

«El enviado de Madara ha llegado, su alteza real.»

«Su majestad se encuentra con Marquis Kluge en la sala secreta de reuniones.» Otra doncella respondió con su cabeza agachada

La niña se miró en el espejo. Su cara estaba fría y sin expresión. Se puso un vestido y acomodo su cabello. Pronto levantó la cabeza y dijo:

«Tráeme a Gammel.» Había pensado que habría una posibilidad de cambiar la situación, pero el astuto Marquis Kluge era alguien en quien no se podía confiar. Tenía que encontrar a un confidente confiable para hablar de esto, y no enfrente de esos sirvientes.

«Sí, su alteza real.»

Era el comienzo de junio el ‘año de bulliciosas hojas y flores de verano’.

***************

Brendel miró como las ramas del Árbol Demoníaco Dorado gradualmente estaban perdiendo su color. Conforme bajaban, supo que ese aterrador monstruo había llegado al final de su vida. Se sentía mentalmente cansado. Había pagado dos EP para mantener la espada santa, y ese efecto también pareció haber afectado su mente.

Él era un guerrero y no un mago. Incluso entonces, un asistente especializado en su nivel solo tendría diez EP más.

Freya y Romaine se sentaron a un lado con su resistencia completamente agotada. Freya se había lastimado un poco el brazo, pero por lo demás estaba bien. Y estaban encantadas de haber derrotado a un enemigo imposible.

Ambos miraron con curiosidad cuando vieron a Brendel caminando hacia el Árbol Demoníaco Dorado

[¡Limite Fuera!]

Giró la Espada Elfica por el tronco del árbol. El moribundo Árbol Demoníaco Dorado no era más que un roble ahora, y no pudo resistir el valor de 7.7 OZ de fuerza de Brendel. El golpe meteórico rasgó la parte superior del árbol.

Las chicas gritaron sorprendidas, sin entender lo que estaba haciendo.

Brendel sabía que el Árbol Demoníaco Dorado colgaba sus presas muertas en la copa del árbol y lentamente absorbía el mana de ellas. A pesar del paso de los años, podía haber algo de botín en ello.

Brendel se acercó y miro una tarjeta tirada en el suelo.