Su tiempo (3)

Para limpiar el piso 12, necesité casi mil muertes. 

Para el piso 13, necesitaría incluso más. 

 

“Emperador de la Espada.”

―¿Qué?

Hagamos una apuesta.”

―¿Qué apuesta?

 

Corté el cuello del zombie que estaba corriendo hacia mí. Mi espada lo atravesó como si estuviera cortando tofu. Hablé mientras miraba a las decenas, cientos y miles de esos corrían hacia mí.

 

“Cuántas veces moriré hasta el piso 19. Hagamos una apuesta.”

―Mmm. 

Bae Hu-ryeong se acarició la barbilla. 

―Bien. ¡Entonces iré por 100 o menos!

Sonreí.

“Entonces haré 99.“

―Wow, bastardo injusto. ¿Quieres jugar así de cobarde? ¿Eh?

“Si. Quiero.”

Él sonrió. 

―Bien. Veamos cómo el zombie mata a los de su propia especie. ¡Hazlo bien! En cambio, como es una apuesta, no te ayudaré. ¿De acuerdo?

“De acuerdo.”

 

Me reí mirando a los zombis que corrían hacia mí. 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

Morí mientras reía.

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

 

“Uf, tenemos que hacer algo sobre esta cantidad… Bruja, ¿no puedes hacer algo?”

“Ya estoy haciendo mi mejor esfuerzo. Sólo soy yo. Es difícil. Pero Rey de la Muerte, ¿no puedes usar tu habilidad para luchar contra ellos?”

“Ah, por supuesto que lo haré. Pero todavía no es el mejor momento.. .en unas 3 monedas más tendré que usarlo.”

“¿Qué son 3 monedas?”

“Hay esta cosa. Mmm, de todos modos… hmm, esta cosa en el mini mapa… ¡ah! ¡Santo de la espada! ¡¿Puedes atravesar allí?! ¡A través de esa gran tapa que parece un ataúd de piedra! ¡Tengo algo que comprobar!”

“¿Qué vas a comprobar?”

“¡Te lo explicaré más tarde, así que te pediré esto ahora mismo! ¡Soy un profeta! ¿Bien?”

“Mmm…”

 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

 

“¡Bien! ¡Santo de la espada! Ese ataúd de piedra es en realidad una abertura secreta. ¡A través de allí, puedes encontrar un martillo que tiene un efecto sobre los no muertos! ¡Puedes ir con la Bruja y usarlo!”

“Él solamente ha usado una espada en toda su vida.”

“¡Tiene un gran efecto territorial! Si pones tu Aura en él y lo golpeas contra el suelo, ¡los zombies serán barridos! ¿¡Bien!?”

“¿Como sabes eso?”

“¡Profeta! ¿¡Bien!?”

“Pues, yo nunca…”

 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

 

“Los zombis están a punto de ser atendidos, así que ahora, el Rey Diablo, uf ¿qué es eso?”

“Zombies. Gigantes. Creo que es un gigante zombie.”

“Mmm. Dado que la historia del templo es bastante antigua… probablemente sea un soldado gigante que solía proteger este templo. Murió junto al Rey Diablo y se convirtió en su subordinado… probablemente sea algo así. Si el Cuestionador Hereje estuviera aquí, habríamos sabido más…”

“Vaya, ¿esa persona también sabe sobre religiones de otro mundo? Supongo que no es un fanático de Clase SSS en vano.”

“Es por su habilidad.”

“Bueno, esa es la prueba de su clase SSS.”

“Que desagradable. ¿Tienen que hablar de ese maldito bastardo? De todos modos, me quedo con ese gigante.”

“Sí, señor, Santo de la Espada. ¡Lo dejo en tus manos!”

 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

 

“De todos modos, me quedo con ese gigante.”

“No, Santo de la Espada. Puedes seguir ocupándote de los zombies con el martillo.”

“Mira aquí, ese gigante está probando mi espada, así que…”

“¡Profeta! ¡Soy un profeta! ¿Está bien?”

“Sheesh… eh, entonces, ¿quién se encarga de ese gigante?”

“Obviamente, la Bruja. Por favor, apunta tu Rayo al ojo de ese gigante.”

“Bien. Es un ojo al que quería apuntar. Básicamente, lo está rogando con ese ojo gigantesco.”

“¡Perfecto! ¡Vamos!”

 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

 

“De todos modos, me quedo con ese…”

“¡Invocación de Cien fantasmas!”

“Dios mío. Rey de la muerte. ¿Tu habilidad ni siquiera tiene tiempo de enfriamiento?”

“Sucedió así… está bien, ustedes dos pueden lidiar con ese gigante. Y especialmente Bruja. Tengo algo que quiero pedirte.”

“¿Qué es?”

“No apuntes al ojo.”

“¿Cómo?”

“Si lo haces, las cosas irán mal.”

“Pero Rey de la Muerte. Mira al zombie gigante con un solo ojo. Mira el gigantesco ojo. ¿Puedes verlo?”

“Sí… lo estoy mirando. Sé que básicamente está suplicando ser un objetivo. Pero no puedes.”

“¿Cómo? Ese… ojo, Rey de la Muerte… si pudieras usar un Rayo como yo, y vieras un globo ocular como ese…”

“Lo admito… Bruja. Si fuera tú, intentaría argumentar que apuntaría a ese ojo. Pero no tengo tiempo para explicar eso ahora mismo… ¿por favor?”

“Uh…”

“Escúchalo, Bruja.”

“Santo de la Espada, incluso tú…”

“Ese joven dice que es un profeta. Escuchémoslo por ahora.”

“…Bien… haré mi mejor esfuerzo… no apuntaré a ese globo ocular.”

“¡¡Gracias!!”

 

Corrimos. Nos peleamos. Nos salvamos el uno al otro. 

Hicimos cosas. 

Hablamos de mucho. 

 

-¡Mis hijos.!

Nos abrimos paso a través de los zombies que estaban en el templo. 

-¡Mi general….!

Hicimos a un lado al soldado gigante de un solo ojo que probablemente fue una leyenda en sus días.

-¡AHHHH…! 

 

| El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal elige retirarse. |

Y, 

| ¡El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal está retrocediendo al piso 14! |

 

Empujamos al Rey Diablo piso por piso. 

Como en el piso 12, las gotas de luz se arremolinaron. 

El templo que era la barrera del continente brillaba como un escudo recién limpiado. 

Con el sonido de una campana, la gente cantaba canciones. Desde el este, los comerciantes montaban a caballo, y desde el oeste, los mercaderes pasaban sobre pájaros extraños. Los paladines empujaban sus martillos juntos mientras se peleaban, y las apóstoles que los miraban con ojos amorosos fueron llevadas al templo por sus orejas. 

 

“¡La sacerdotisa estornudó!”

Había un huérfano que gritó en broma y recibió un nudillo en la cabeza por parte de una apóstol. Un soldado tuerto le hizo un gesto con la mano a ella. 

 

¡Ah! 

“Rey de la muerte.”

Mmm. 

“Está bien… Bruja. Vámonos. Muy bien, Santo de la Espada, ¿estás listo?”

“Espera un momento. Hay un comerciante que vende buenas piedras de afilar por allí.”

 

El viejo trajo una piedra de afilar. Mientras agudizaba su espada, aparté la mirada del gigante y miré el mapa del mundo. 

La tierra roja que estaba bastante lejos se retorcía como si fuera a apiñarse aquí de nuevo. 

Pero todavía teníamos tiempo para que él afilara su espada. 

Eso sería suficiente.

 

“Rey de la muerte.”

La Bruja agarró mi mano. Cuando el Santo de la Espada terminó, inmediatamente tomó la mano de la Bruja también.

“Teletransportación.”

La luz nos rodeó de nuevo.

“Hmm. El piso 14 es un bosque. El Rey Diablo… parece haberse escondido.”

“Ten cuidado. Puedo sentir enemigos a nuestro alrededor.”

“Si. Vayamos despacio. Despacio.”

 

| Has muerto.

Estás regresando a hace 24 horas. |

Y así, despejamos el camino a través del ejército de los Elfos del Rey Diablo. 

| El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal ha decidido retirarse.

¡El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal está retrocediendo al piso 15! |

 

En medio de una cascada que fluía en reversa, derrotamos al Rey, que estaba usando a la Reina de las Sirenas.

|El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal ha decidido retirarse.

¡El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal está retrocediendo al piso 16! |

 

En la cima de un volcán que explotó, luchamos contra los wyverns usados por el Rey Diablo. 

| El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal ha decidido retirarse.

El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal cae de nuevo al piso 17…|

 

La historia estaba retrocediendo. 

A un tiempo antes de que el Rey Diablo atacara el imperio. 

No solo al imperio, sino antes de que atacara a varias tierras. 

Antes de que el templo fuera destruido. 

Antes de que el Bosque de las Hadas fuera maldecido, antes de que la cascada fluyera en reversa, e incluso antes de que el volcán explotase. 

Antes, antes. 

Antes de que el Rey Diablo gobernara un ejército. 

Sin pausa alguna. 

Como si una ola cubriera a otra, y similar a una gota de agua que desaparece tal como una burbuja. 

Similar a como caían los pétalos de las flores. 

Cada vez que subíamos a la torre, su territorio se reducía y debilitaba. 

 

| La existencia del Rey Diablo de la Lluvia Otoñal se está debilitando. |

 

Como el Rey Diablo del piso 13 era más débil que el piso 12. 

El Rey Diablo del piso 14 era más débil que el 13.

Y el 15 fue un poco más débil.

Y poco a poco, poco a poco…

 

| Has muerto. |

 

| El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal ha decidido retirarse.

La existencia del Rey Diablo de la Lluvia Otoñal se está debilitando. |

 

| Has muerto. |

 

| El Rey Diablo de la Lluvia Otoñal ha decidido retirarse.

La existencia del Rey Diablo de la Lluvia Otoñal se está debilitando. |

 

-¡Te atreves!

 

La 97ª vez. 

Cuando llegué al piso 19 mientras estaba en mi 97º muerte, estábamos en un pequeño país desconocido. 

 

-¡Te atreves! 

El Rey Diablo lloró en medio de la vacía tierra. 

No era al Santo de la Espada o la Bruja. 

La persona a la que el Rey Diablo miraba mientras rechinaba los dientes era a mí. 

 

-¡Si no fuera por ti!

Sus ojos estaban inyectados en sangre con furia. 

-¡Es por ti! ¡Todo es culpa tuya! Si siguieras los pasos correctos… ¡Sí! Si no fuera por ti, ¡Esto no habría sucedido! ¡Te atreves! Un miserable usuario de la espada de otro mundo…

Levanté mi espada. 

“Maldita sea. Finalmente veo los ojos.”

-¿Qué…?

“Es exactamente como dije. Después de todo este tiempo, finalmente veo cómo son tus ojos.”

 

Si. 

El original Rey Diablo de la Lluvia Otoñal no tenía ojos. 

Era una sombra que se retorcía. Tenía rostro, pero no expresión. Tenía brazos, pero no manos. Aguas residuales. Porque estaba cubierto en esa hirviente solución negra. 

Así fue como era.

 

“¿Tiene sentido?”

Su máscara finalmente se rompió. 

“El Rey Diablo y un guerrero que no pudieron mirarse a los ojos. Es una increíble tragedia.”

 

Y finalmente, hubo una parte que no estaba cubierta por aguas residuales. Ojos inyectados en sangre. Emanaron un Aura asesina grotesca pero… no estaba asustado. Más bien, estaba alegré. 

 

Apunto mi espada hacia él.

“Lucha con todo lo que tengas.”

-Tú…

“O huye de nuevo. Oye, ¿no tienes curiosidad? Cuán más débil te volverás si te escapas esta vez.”

– ···

“Si no luchas con lo que tienes, no podrás ganar.”

 

Incluso sin las recompensas que obtuve del piso 19, el Rey del piso 20 habría sido completamente débil. 

 

-Te atreves a decir… una simple hiena que se comió toda mi carne, ¿qué sabrías…?

 

Era una voz gruñona como si me estuviese maldiciendo. 

Había una sombra pérdida donde él estaba.

 

Abrí lentamente mi boca. 

“Estelle.”

Pausa.

Los ojos rojos del Rey Diablo se agrandaron. 

 

“Te advertí que lucharas con todo lo que tienes.”

– ···

“Si no lo haces-”

 

Y golpee al suelo sobre el que estaba parado.

Un grito explosivo vino de él. 

El agua negra se agitó por todas partes. 

 

“Mi tiempo será más largo que tu historia.”

 

Al escuchar al Rey Diablo, Estelle, gritar, lo miré. 

Cara a cara.

Hacia el camino por el que andaba.