YNH – Capítulo 177

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Capítulo 24 Volumen 05


 Afuera de la entrada principal a la ciudad de Elgrad, ese hombre estaba distraído sentando en una roca.

 El hombre que vestía armadura roja que tenía pegadas espinas de apariencia maligna y balanceaba un hacha de batalla que sostenía en su mano, la cosa conocida como motivación no podía sentirse en absoluto en él.

 Si él no proviniera del anteriormente mencionado castillo misterioso, no habría duda de que él habría sido ignorado como un simple Mazoku extraño.

 Después de que el hombre de armadura roja observó la ciudad de Elgrad por un tiempo, sacó una moneda horneada de su bolsa y comenzó a mordisquearla.

「… Está completamente fría.」

 Mientras decía esa clase de cosas, le dio otro bocado.

 Masticando, de frente al hombre de armadura roja… Desde lo alto del muro de la ciudad de Elgrad, se pudieron escuchar algunas voces.

 Después de ese bullicio que sonaba como una pelea, un solo hombre saltó desde el muro.

「¿Qué demonios es eso?」

 El hombre de armadura roja observó esa figura con asombro.

 El muro era estúpidamente alto e incluso si era un Mazoku que tuviera excelentes habilidades físicas, no era una altura de la que se podía saltar casualmente.

 El hombre que saltó desde allí sin ninguna vacilación eventualmente aterrizó junto a un temblor en el suelo.

 El hombre observó en los alrededores, encontrando al hombre de armadura roja, luego caminó hacia él.

 Después de acercarse lo suficiente para estar frente a él, sonrió ampliamente.

「Yo, me llamo Raktor. Tú, ¿cuál es tu nombre?」

 Habiendo dicho esto, el hombre de armadura roja observó al hombre quien se presentó a sí mismo como Raktor.

 Aunque estaba asombrado por la actitud amistosa tomada por el hombre con una apariencia verdaderamente de villano, el caballero rojo sacó una pieza más de moneda horneada de su bolso y se la lanzó.

「Mi grandeza es llamada Olred.」

「Ho-… Mu, esto es muy bueno. ¿Cómo se llama?」

 Olred le dio una explicación a Raktor quien atrapó la moneda horneada y la mordió.

「Es una moneda horneada. Es algo que es la última locura en un país llamado Reino San Altlis.」

 Después de que Raktor asintió luciendo impresionado, lanzó el resto de la moneda horneada en su boca.

「Mugug, aguh… fuuu. Gracias por el regalo.」

「Nn, ou.」

 Olred respondió así, luego término de un bocado el resto de la moneda horneada que sostenía en su mano.

 Estimando cuando la moneda horneada desaparecería de la boca de Olred, Raktor luego señaló la ciudad detrás de él.

「Es una buena ciudad, ¿cierto? Se llama Elgrad.」

「… Claro.」

「Esta tierra salvaje donde no hay nada más que tipos que hacen alboroto, incluyéndome, hasta no hace mucho, ahora es así. Con manos que no sabían nada aparte de asombrar personas, están haciendo accesorios y dulces que son populares con las mujeres.」

「… Ya veo.」

 Raktor se dio la vuelta para asentir ante Olred.

「¿Sabes? Los Dragones quienes siempre van con el orgullo, ahora están sintiendo que tener clientes cabalgando en ellos y correr es el propósito de su vida. Increíble, ¿cierto?」

 Olred le asintió brevemente a Raktor quien estaba dejando salir una risa suprimida.

 Después de eso, el último dejó de reír por completo y pasó a un rostro serio.

「… Entonces, ¿qué asunto tienes aquí? Si estás aquí por las visitas turísticas, no es como si no te diera la bienvenida.」

 Raktor hizo esa pregunta mientras emitía una abrumadora presencia maligna.

 Recibiendo esa sensación que era lo suficientemente fuerte para hacer que incluso un Mazoku normal, sin mencionar un Goblin, sintiera que se desmayaría, Olred respondió sin ningún cambio en su condición.

>>>Ilustración<<<

「¿Cuál es mi asunto… huh? Sería bueno si fueran las visitas turísticas.」

 Era verdad, su objetivo no eran las visitas turísticas.

 La misión dada a Olred era ser una distracción y comprar tiempo. Era convertirse en una pieza de sacrificio por el bien del movimiento final.

 Por el bien de esto, correr salvajemente era la forma rápida.

 Pero, incluso después de entender eso, Olred fue incapaz de hacer eso.

 Algo era concluyentemente un error- esa clase de sensación molesta había acabado con la motivación de Olred.

 Él entendía que debía llevar a cabo su misión.

 Pero incluso así, él no se movió.

 Algo estaba mal… Pero, no tenía idea en absoluto de que estaba mal.

 Es por eso por lo que Olred estaba distraído. Era debido a que él sentía que si dejaba de pensar y dejaba que sus pensamientos se aclararan, eso podría resolverlo todo.

 Pero, entre más lo hacía, más preguntas comenzaban a salir.

「¿Ah?」

 Notando el estado de Olred, Raktor puso un rostro confundido.

 Él no estaba atacando sin hacer preguntas, simplemente estaba distraído.

 Ir en contra de esa clase de oponente, esta era la primera experiencia para Raktor.

 Sin embargo, su expresión se endureció ante las siguientes palabras de Olred.

「No lo entiendo. Debería ser correcto, pero no entiendo por qué es correcto. Masacrarlos a todos y masacrar a Vermudol. Cualquier cosa y todo debería estar bien al hacer eso.」

 Él dijo que debería ser correcto hacer esto.

 Sin embargo, cuando fue transferido a Elgrad, cuando escuchó las risas que venían del interior de la ciudad, las dudas nacieron dentro de Olred. No sabía por qué no lo había notado hasta ahora, pero las dudas seguían brotando una tras otra.

 Asesinar a los Mazoku del Continente Oscuro y asesinar al Rey Demonio del Caos Vermudol.

 ¿Qué se encontraba más allá?

 Él definitivamente debería ver esto y pensó que algo brillante estaba esperando.

 Sin embargo, ¿qué ocurría ahora?

 El actual Olred no lo sabía en absoluto.

 Era cierto.

 Para empezar, ¿cuál era su origen?

 El origen de sí mismos y Ykslaas a quien le tenían respeto y afecto. Si él pensaba desde allí, quizás…

「… Yo realmente no lo entiendo, pero.」

 Raktor dejó salir un suspiro hacia Olred quien había caído en el silencio y estaba distraído.

「Tu, ¿para qué es qué has venido?」

 Mientras era despreciado por el oponente que era más decepcionante de lo que esperaba, Raktor puso una apariencia de asombro.

 Y luego- él sintió algo que era como un escalofrío.

 Algo sobre Olred quien no hacía nada aparte de distraerse frente a él repentinamente había hecho un cambio completo.

 Sus ojos recuperaron algo de brillo y una sonrisa sin miedo se expresó en sus labios. La fuerza lleno cada músculo en su cuerpo.

 Lentamente, Olred se levantó de la roca.

「¿A qué he venido aquí? Es obvio.」

 Después de golpear el suelo con su gigantesca hacha de batalla, el caballero sonrió.

「He venido a aplastarte. Para aplastar al Rey Demonio del Caos y sus seguidores y traer de regreso la armonía al mundo. Esa es la misión dada a mi grandeza.」

「Hoo. En ese caso, ¿estás bien sin la visita turística?」

 Escuchando eso, el caballero resopló.

「¿Visita turística? Una vez que termine lo haré hasta saciarme. Bueno, será una montaña de escombros una vez que termine.」

 Olred pensó “es cierto, es así”.

 Romperlo todo y no dejar nada atrás.

 Ese era el único método que guiaría al mundo hacia el flujo de la armonía.

 Para comenzar, sería esta ciudad. Él mataría al hombre frente a él, luego destruiría la ciudad.

 Todo, era por el bien de la Reina Demonio Ykslaas-sama a la cual él respetaba y quería.

「Bueno, entonces, muere.」

 Olred preparó su hacha de batalla y la dejó caer sobre Raktor.

 Pero, esa hacha de batalla no alcanzó al general.

 Fue debido a que al instante en que Olred trató de dejar caer su hacha de batalla, Raktor, quien estaba haciendo un rostro como si hubiera masticado un bicho amargo, lo había pateado.

 El general rascó su cabeza mientras dejaba salir un gran suspiro y veía a Olred quien rodaba hacia atrás.

「Ah-… Entonces es así. Tu, tu estás siendo controlado por algo, ¿no?」

「Gu… ¡De qué estás hablando!」

 Raktor apuntó con un dedo al caballero quien se puso de pie.

「No estoy hablando de cualquier cosa o cualquier mierda, idiota. Justo cuando sentí simpatía porque pensé que era un tipo que estaba preocupado por algo, tu mente repentinamente se refrescó. Incluso los Goblins son un poco más estables que esto.」

「No tengo idea de lo que estás hablando. No, para empezar, ¿quién eres?」

「… Entonces comenzaremos desde aquí. Soy Raktor.」

 Después de asentir ante las palabras de Raktor, Olred una vez más preparó el hacha de batalla.

「Mi grandeza se llama Olred. En el nombre de la Reina Demonio de la Armonía, Ykslaas, he venido a destruirlos a todos.」

「Ho-, eso es muy sorprendente. Ohh, ohh. Estoy súper asustado. Estoy tan asustado que estoy cubriendo mis oídos.」

 Mientras ponía sus dedos en sus propios oídos, Raktor dio un bostezo.

 Honestamente, él ya no tenía ningún interés.

 Le gustaban las peleas y también le gustaban las peleas a muerte. Desde que el choque de las almas era divertido cuando trataban de acabar uno con el otro con seriedad, Raktor disfrutaba pelear.

 Sin embargo, este hombre frente a él llamado Olred no tenía una voluntad propia. Estando atado por algo que parecía como un crudo lavado cerebral, no era nada más que una lamentable marioneta.

 Tipos quienes hacían cosas así también existían en el viejo Continente Oscuro. Los Mazoku que actuaban como estrategas, timaban a los tontos miembros de su misma raza con palabras engañosas y los lanzaban sobre Raktor.

 Para tipos como ese, el general siempre los localizaba y los golpeaba.

 … Era por eso, que él también haría eso en esta ocasión.

 Incluso ese alguien en esta ocasión, convirtió a este lamentable hombre llamado Olred en una marioneta y le hizo meterse con ellos.

 Además, era un nivel de intromisión que no era divertido.

 Para Raktor, para la ciudad de Elgrad, para Vermudol. Estaban buscando pelea con todos lo que componían el Reino Zadark.

 Raktor no tenía la intención de permitir esto.

 Él localizaría a la mente maestra y lo convertiría en pequeños pedazos. Esto ya era un asunto decidido.

 Es por esto por lo que él llevaría un final rápido a la pelea con el hombre frente a él. Desde que sentía que el caballero era lamentable, por lo menos, no lo mataría.

 Raktor lleno la distancia inmediatamente y envió a volar a Olred con un golpe serio.

 Solo con eso, Olred fue enviado a volar hacia las distantes tierras salvajes mientras giraba como un trompo.

「¡Ah… haah…!」

 Simplemente un solo ataque. Solo con eso, Olred se desmayó sin usar el poder que habitaba en su cuerpo.

「Parece que posees una tremenda cantidad de poder mágico, pero para una marioneta como tu quien no tiene su propia voluntad, se desperdicia.」

 Después de confirmar que Olred se volvió incapaz de moverse, Raktor observo el cielo nublado.

 Lo que recordaba eran las palabras que el caballero dijo después de que cambió repentinamente de personalidad.

「La Reina Demonio de la Armonía… huh. Pensando nuevamente en esa comida llamada moneda horneada, era razonable pensar que ellos venían del territorio de la humanidad, pero…」

 Raktor recordó la charla que tuvo antes con Vermudol.

 El Rey Demonio Shuklous que se decía estaba en el territorio de la humanidad. El otro Rey Demonio que la Diosa de la Vida pudo haber creado.

「… La Reina Demonio de la Armonía, huh.」

 En ese caso, esta Reina Demonio de la Armonía, Ykslaas o lo que fuera, la posibilidad de que fueran de la misma clase de Shuklous era alta.

 Pero, incluso así, el ataque en esta ocasión estaba muy mal preparado.

 Él fue capaz de pensar que este era un movimiento hecho en desesperación debido a que las medidas de Vermudol estaban siendo efectivas.

 Pero, había algo que no tenía sentido. Debía haber algo.

 Raktor continuó pensando en ello… Sin embargo, chasqueo su lengua por cómo la respuesta no llegaba.