Capítulo 015 Volumen 01
General del Oeste Sancreed.
Fainell miró al hombre que fue presentado así.
Su altura era mayor a la de Vermudol. Tenía un cabello dorado un poco corto y ojos azules. Su cuerpo bien proporcionado estaba cubierto por simples vestimentas azul oscuro. La armadura que usaba encima, era simple. Sin embargo, ella podía ver que tanto su vestimenta como su armadura contenían una densidad extremadamente alta de poder mágico. No llevaba un arma, pero sus músculos le permitían suponer que era un espadachín.
Era considerablemente fuerte.
Esa era la impresión que tuvo Fainell de Sancreed por lo que ella vio.
General del Oeste Sancreed.
Altejio miró al hombre que fue presentado así.
El hombre llamado Sancreed era adecuado como un espadachín.
No pudo encontrar nada que se viera como una apertura y se podía decir que había tomado un lugar donde podría proteger a Vermudol.
A pesar de eso, probablemente también era un mago de alto nivel.
En ese caso, su estilo de combate era muy probable que fuera el de un Espadachín Mágico.
Sin embargo, Altejio no conocía a ningún espadachín de ese nivel.
En ese caso, probablemente era un nuevo Majin creado por las manos del Rey Demonio.
Esa era la impresión que tuvo Altejio de Sancreed por lo que él vio.
General del Oeste Sancreed.
Raktor no quitó sus ojos del hombre que fue presentado así.
Fuerte.
Podía decir eso con solo un vistazo.
Sin embargo, eso no importaba en lo más mínimo.
Viendo al hombre llamado Sancreed, hubo dos emociones que hirvieron en el interior de Raktor.
Era el miedo que sacudió su alma.
Era la alegría similar a la adoración.
Raktor conocía esas emociones.
Raktor recordó esas emociones.
Anteriormente, hubo alguien que hizo que Raktor le tuviera miedo.
Hubo alguien que, sin importar cuantas veces fuera derribado, se volvería a poner de pie y lo desafiaría una y otra vez.
Y luego, hubo alguien que rompió a través de todo lo que Raktor le lanzó de frente.
Hubo alguien que cargaba esperanza y blandía la desesperación.
Raktor, lo sabía.
Conocía a alguien que poseía ojos brillantes similares a los de Sancreed.
Ojos que contenían cada sentimiento y ocultaban una compasión infinita y un coraje inquebrantable dentro de ellos.
Esos ojos, Raktor sabía de ellos.
Esos ojos, Raktor nunca los olvidaría.
No había forma de que pudiera olvidar el alivio y humillación que una vez ignoro.
「El Héroe…」
Fainell y Altejio reaccionaron ante el murmullo de Raktor.
Este se movió antes de que los ojos de los dos pudieran atraparlo.
Reunió poder mágico junto con sus furiosas e hirvientes emociones en su mano derecha aún abierta.
Esa mano brilló hasta el punto de ser deslumbrante.
Sin siquiera tomar una postura, Sancreed miró tranquilamente a Raktor.
「¡Hé… roeeeeeeee!」
Gritó.
Incluso olvidó que Vermudol estaba justo a un lado de Sancreed.
Ni siquiera notó que Sancreed detuvo a Ichika, quien estaba a punto de moverse.
Con el fin de despedazar a Sancreed miembro por miembro, Raktor balanceó su mano hacia abajo –
「Guardia de Ataque.」
Y fue repelido por la barrera que Sancreed había desplegado y dio unos cuantos pasos hacia atrás.
Sin embargo, Raktor no se detuvo sólo con eso.
No había manera de que se detuviera.
El impulso que se despertó en Raktor hizo que su razón se desvaneciera y le susurró que volara todo el Castillo del Rey Demonio. Raktor estaba a punto de abandonar su forma de Majin pero –
「… Raktor.」
Sintió una presión abrumadora que incluso apartó ese impulso.
No, no era sólo él.
Todo lo que existía en el Castillo del Rey Demonio sintió esa abrumadora presión.
El lugar se llenó con la voluntad de un gobernante que congelaba los sentidos, hizo temblar la atmósfera e hizo que todo y todos cayeran postrados.
Raktor lo vio.
Los ojos de Vermudol, que brillaban en rojo.
Con solo eso, él se resignó a morir.
Podía sentir que todo lo que lo componía como un Dragón Escamado, que pretendía ser el más cercano al Rey Demonio, estaba intentando abandonar su existencia.
「Uu… Oo…」
Arrodillándose detrás de Raktor, Fainell y Altejio rompieron en un sudor frío.
Lo de apenas hace un momento fue un brillo similar a los [Ojos Mágicos de la Intimidación]. Sin embargo, no eran tan refinados como los [Ojos Mágicos de la Intimidación] de Gramfia.
Si Vermudol fuera a ser un Rey Demonio incluso por un instante, entonces debería poseer los mismos Ojos Mágicos que Gramfia quien también fue un Rey Demonio.
Eso significaba que Vermudol probablemente aún no era capaz de usar por completo ese poder.
Pensando en ello a la inversa, tenía tanto poder a pesar de eso.
Si este fuera el caso. Si era con este Rey Demonio, sería posible derrotar al Héroe en esta ocasión.
Pensándolo hasta allí, Altejio alzó su cabeza como si tuviera un resorte.
「Rey Demonio-sama… ¿Quién es ese hombre llamado Sancreed?」
Incluso si Raktor era un Majin del beligerante sur, era difícil creer que era lo suficientemente estúpido como para ignorar el lugar. Más que todo, Raktor murmuró la palabra Héroe.
「Nn… Sí. Estaba pensando presentarlo con todo detalle, pero, cielos… Raktor, probablemente me rompería si te enfureces.」
「P, Perdón… seré, cuidadoso.」
Cuando Raktor, quien se tambaleaba intentando levantarse respondió eso, Altejio y Fainell regresaron junto a él.
「… Fue demasiado lejos, Rey. Debió existir algún método mucho más pacífico.」
Finalmente, Sancreed abrió su boca.
「No lo había, ¿sabes? Raktor es el campeón de la gran batalla de monstruos gigantes del sur. Si las cosas fueran a continuar a este ritmo, hubiera perdido mi lugar para dormir, desde esta noche en adelante.」
「Aun así. Si sólo elige el método más sencillo, no habrá futuro.」
En cierta manera, ese era un extraño espectáculo.
Sancreed, quien estaba siendo recibido con una actitud como si él fuera un igual por el Rey Demonio Vermudol, que estaba detrás de la presión abrumadora, estaba cruzando audazmente los límites.
Cuando él interrumpió a Sancreed pareciendo que estaba molesto con él, Vermudol nuevamente se giró hacia Altejio y los otros.
「Y entonces. Altejio, ¿podrías prestarle el [Cristal Revelador] de antes a este tipo?」
「S, Sí.」
Habiéndose rendido en hablar, Altejio tomó el [Cristal Revelador], se puso de pie y se lo entregó a Sancreed que se acercaba.
「Gracias… erm.」
「Soy el General del Norte, Altejio.」
「Ya veo. Estaré a tu cuidado.」
La malicia en Altejio fue retirada por Sancreed, quien elevó ligeramente las esquinas de su boca y sonrió.
Era una sonrisa que no tenía rastros de maldad, lo que era poco característico en una sonrisa Majin.
Había pasado bastante tiempo desde que algo como eso fue dirigido hacia él.
「Entonces, está bien si sólo le rezo silenciosamente a esto, ¿cierto?」
Cuando dijo eso, Sancreed puso su conciencia en el [Cristal Revelador]… Muy pronto, su Estado apareció en la superficie del cristal.
Nombre: Sancreed
Raza: Majin
Rango: SSS
Ocupación: Héroe
Equipamiento: Ropas de Espadachín Mágico
Armadura de Espadachín Mágico
Habilidades Técnicas: Poder del Héroe B
Protección Divina del Dios Demonio D
「Un Majin…」
「¡¿Un Héroe…?!」
Vermudol expresó una oscura sonrisa hacia los tres sorprendidos Generales Cardinales.
「Es correcto. La esperanza de los Mazoku se convirtió en un Héroe Majin… Este es el General del Oeste Sancreed.」
Eso fue algo que al anterior Rey Demonio Gramfia no se le ocurrió.
Era debido a que estaba bajo la impresión que el Héroe era una existencia sólo permitida para la Humanidad.
Sin embargo, no había forma de que se le ocurriera esta idea.
Era debido a que Vermudol fue enviado por el Dios Demonio y era un irregular que de alguna forma se desviaba de la regla de este mundo de Remfilia que fue capaz de llegar a tal conclusión.
El Héroe Majin Sancreed. Llevando una multitud de deseos y la apertura del futuro, la esperanza de los Mazoku.
Las noticias del nacimiento del Héroe Sancreed y el nombramiento oficial de los Cuatro Generales Cardinales, junto con sorpresa… y una gran alegría, se esparció ampliamente en todo el Continente Oscuro.
