VVC – Capítulo 857

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Capítulo 857: ¡Todavía somos amigos!


Gu Xijiu siempre había pensado que le gustaba estar anclada en un puerto tranquilo. Sin embargo, se dio cuenta de que con frecuencia se sentía atraída por los violentos mares con olas gigantes e impredecibles. Justo cuando quería nuevamente meterse en el océano, recordó que no era una nadadora hábil. Si saltaba al agua, perecería bajo las olas gigantes.

¿Realmente a él le gustaría otra persona? ¿Las cosas que decía eran dignas de confianza? Había sido amable con ella antes, ¿pero lo hacía con sinceridad? ¿Sólo intentaba burlarse de una joven por un momento de curiosidad? La imagen de Di Fuyi apareció inesperadamente frente sus ojos. De hecho, también recordó su reciente actitud. Parecía haberla dejado ir por completo, sin contenerse en absoluto. ¿El sentimiento que sentía por él se llamaba amor?

Probablemente era sólo un enamoramiento, ya que él había sido demasiado misterioso, demasiado fuerte y demasiado ansioso por atención. No necesariamente era ‘amor’. Estaba sacudiéndose y dando vueltas alrededor. Se dio cuenta de que todavía estaba muy confundida.

Después de pasar unos momentos contemplando en su cama, saltó de ella y se enjuagó el rostro con un poco de agua fría. Le dio un vistazo afuera y notó las primeras hebras tenues del amanecer. Los cielos ya se estaban volviendo brillantes.

De pie frente al espejo, se frotó suavemente sus ojos con círculos oscuros – las consecuencias de permanecer despierta durante toda la noche. Observó su joven e inmaduro reflejo en el espejo y abruptamente rio.

“Gu Xijiu, ¿cuántos años tienes? ¿Por qué te enredaste en una relación madura? Tu objetivo actual debería ser estudiar y volverte fuerte. No estás aquí para contemplar semejantes asuntos. Esto no es como tu”.

Se calmó así misma y meditó un pequeño tiempo para verse mejor. Después se lavó el rostro y se enjuagó la boca otra vez. Aplicó ligeramente un poco de maquillaje para cubrir sus ojeras. Sus habilidades de maquillaje eran más allá de lo competente. Nuevamente lucía como una joven energética y llena de espíritu en poco tiempo.

Cuando terminó, se dirigió hacia la puerta, sólo para darse cuenta de que Long Siye ya estaba allí esperándola. Ella detuvo sus pasos. Después del beso incómodo de anoche, estaba un poco reacia a verlo nuevamente.

“Xijiu, estas despierta. Ven, vamos a desayunar”. Long Siye nunca mencionó una sola palabra de lo que pasó anoche y se acercó con una sonrisa.

Gu Xijiu era una persona franca y directa. Estaba bien cuando todavía no había aclarado sus sentimientos hacia Long Siye. Ahora que los entendía claramente, era especialmente culpable. Sabía que lo sentía por él. Ahora que había confirmado que sus sentimientos por él no eran los que creía que debían ser, no quería que se enredara aún más. No le haría ningún bien a ninguno si continuaban involucrados en una relación desconcertante. Respiró hondo, “Señor Supremo Long, lo he reconsiderado después de mi regreso, creo…”

Fue interrumpida por Long Siye, “Xijiu, no tienes que decir nada, yo lo entiendo. Fui demasiado agresivo. Por favor, no me guardes ningún rencor. Podemos seguir siendo amigos como solíamos serlo, ¿podemos?”

¿Amigos? Gu Xijiu podía sentir el calor en su corazón. Él fue excepcionalmente considerado y comprensivo. Se sintió aún más culpable hasta cierto punto, pero también aliviada.

No deseaba perder a Long Siye como un amigo. Realmente quería convertirse en su camarada, que luchaba codo con codo con él. Se conmovió y asintió vigorosamente, “¡muy bien! ¡Todavía somos amigos! ¡Maestro Long, gracias! Gracias por tu comprensión. Gracias por todo lo que has hecho por mí. Aunque no pueda pagar tu amor, no vacilare en dar mi vida por ti si es necesario”.

Long Siye le dio una palmadita en el hombro y rio, “¿por qué eres tan cortés conmigo? Todavía eres joven, así que no deberías pensar sobre relaciones. Lo que deberías estar haciendo ahora es concentrarte en tus estudios y practicar tu Kung Fu. No te avergüences a ti misma como discípula del Señor”.

“¡Definitivamente!” Fue como si un enorme peso se le quitara de encima. Sonrió alegremente, “¡seré la más grande!”