Capítulo 1220: Nadie sabía al final cuánto duraría su amor
No obstante, el rey de las sirenas era un caballero. Incluso si había perdido interés en sus concubinas, les permitía quedarse en el palacio para vivir una buena vida. Sin embargo, nunca las trataría tan bien como antes.
Lan Yaoguang se proclamó a sí mismo como el amante más grandioso y nunca pensó que era melodramático.
Una vez dijo antes que los hombres en el continente a menudo tenían tres o cuatro esposas. A pesar de que algunos de los hombres se casaban con una sola esposa, el tiempo que pasaron juntos era de varias décadas.
Mientras tanto, el amor que él derramó sobre cada una de sus concubinas fue de casi 1.000 años, por lo que sentía que era lo suficientemente leal.
La concubina que actualmente acompañaba a Gu Xijiu fue con la que más recientemente se casó y habían estado juntos por 200 años.
Después de todo, Gu Xijiu todavía era humana. En su mente, pensaba que una relación de por vida era muy rara y preciosa. Se preguntaba cómo sería el amor para aquellas personas que nunca podrían envejecer o morir.
En el mundo humano, la vida útil de una relación era incluso más pequeña. Algunas de las parejas que se amaban mucho podían aburrirse fácilmente con su pareja después de haber estado casados por muchos años. La pasión y el amor se disiparían lentamente y se transformarían en amor familiar. A algunos hombres les gustaba un desafío, así que la mayoría de las veces terminaban engañando a sus esposas y teniendo aventuras con otras mujeres.
En cuanto a estas personas con vida infinita, no era raro aburrirse después de haber visto el mismo rostro durante mil años.
La concubina estaba tratando de expresar su dolor a Gu Xijiu.
Según lo que dijo, una sirena normal podría vivir durante 10000 años. Ella tenía sólo 1.300 años y todavía estaba en su juventud. Sin embargo, después de haberse casado con Lan Yaoguang por sólo 200 años, Lan Yaogung había dejado de consentirla como antes.
La concubina compartió con Gu Xijiu acerca de las tácticas que Lan Yaoguang había usado para ganarse su corazón. Las tácticas que utilizó podrían hacer que cualquier chica se enamorara de él. Por ejemplo, cantaba frente a su casa de conchas marinas y bailaba para ella en público. Le daba todo tipo de preciosos regalos. Incluso la salvó cuando estaba en peligro y casi sacrificó su hermoso rostro.
La concubina finalmente se enamoró de Lan Yaoguang después de ver que él había puesto tanto esfuerzo en cortejarla. A pesar de que era la hija del primer ministro, se casó con él como su séptima concubina.
Gu Xijiu no esperaba descubrir tanto en una visita al jardín. Después de que la concubina terminó su historia, dijo, «Señorita Gu, de hecho, te envidio».
Gu Xijiu respondió, «¿por qué?»
La concubina exclamó, «los humanos tienen una vida muy corta. Creo que sólo posees un poder espiritual de nivel seis y medio, ¿cierto? Incluso si te las arreglas para entrenar tu poder espiritual hasta el nivel nueve, sólo podrías vivir por mil años. En ese caso, sólo estarás al lado del Señor Huang durante unos cientos de años. Él te amará toda tu vida y no tienes que experimentar el dolor de perder el amor».
Gu Xijiu permaneció en silencio.
Por un momento, no supo cómo responderle a la concubina.
De hecho, no había pensado tan lejos. Una vez que se enamoraba de alguien, lo amaría al máximo. Si no lo amaba más, no dudaría en dejarlo ir. Nadie sabía cuánto duraría su amor.
La propia Gu Xijiu no podía garantizar cuánto tiempo duraría su amor. No parecía una amante leal. Quizás, sería la que perdería el interés primero.
A ella sólo le importaba estar enamorada, pero no esperaba que el amor durara por siempre. Aunque en el presente sentía que quería estar con Di Fuyi para siempre, nadie sabía qué ocurriría en el futuro.
Sólo sabía que se amaban en ese momento y se sentía contenta.
