Capítulo 1 – Un [Rolling Stone] no junta musgo
En la cima de cierta montaña, muy por encima de las nubes, un héroe y un villano estaban librando una gran batalla.
“¡Toma esto [Santa Espada de Rayos Infinitos que Destierra la Desagradable Oscuridad]!”
“¡Hah, eso no es nada contra mi [Égida de Oscuridad Divina que Repele a los Héroes Molestos]!”
Grandes hechizos y habilidades volaban en todas direcciones, destrozando el paisaje y rebanando las nubes de abajo. De hecho, era una gran batalla, una que decidiría el destino del mundo.
Pero ¿realmente importaba? ¿Realmente importa eso?
Porque… el destino del mundo cambiaba constantemente de un lado a otro. Siempre había equilibrio. Otro héroe y otro villano. Sí, era el destino del mundo, pero…
Sólo por unos 30 años o por ahí, probablemente.
El récord era de medio año antes de que un nuevo villano se levantara. Una eternidad de paz que acabo siendo bastante corta.
Por lo tanto, realmente no era una batalla tan especial. Batallas similares se habían librado antes. Batallas similares se librarían de nuevo.
Ganará quién ganará, el otro bando acabaría contraatacando.
En definitiva, era una historia sin sentido que no llevaría a ninguna parte.
Por suerte, no son los protagonistas de esta historia. De hecho, quedarán como meras notas a pie de página en la historia, mientras que nuestro héroe protagonizará una historia mucho más grandiosa.
En la cima de la montaña, que temblaba violentamente, había una piedra. Era una piedra bonita, una piedra de gneis. Habría sido más preciso llamarla guijarro. El tipo de guijarro que un niño podría llevar consigo por su bonita forma y colorido. Este guijarro pasaba el tiempo como solían hacerlo las piedras, metido en sus propios asuntos. El jaleo que se oía a su alrededor era bastante molesto, y deseaba tener un poco de paz y tranquilidad.
Sin embargo, eso la dejó perpleja: ¿deseaba paz y tranquilidad? ¿Desde cuándo deseaba algo? ¿Desde cuándo tenía pensamientos? La piedra forzó la mente, pero sólo pudo recordar un largo rato pasado en cómodo silencio. ¿Era nueva esta conciencia?
Lo era.
Hacía sólo unos minutos, uno de los hechizos perdidos del héroe había golpeado este mismo guijarro, provocando algunos cambios extraños. El guijarro encontró la situación bastante extraña y deseó volver al estado de relajación que había estado disfrutando anteriormente.
¿Quién quería ser consciente de que había pasado una eternidad esperando en la cima de una montaña?
Mientras intentaba relajar su mente, el guijarro se fijó en una extraña pantalla que flotaba frente a él. ¿Había estado allí antes? No, tenía que ser nueva. Curioso, el guijarro se centró en el pequeño recuadro gris.
A la piedra le parecieron bastante curiosas las pantallas, pues de alguna manera entendía su contenido. Entendió que las pantallas se referían a sí misma de alguna manera, y que indicaban que el guijarro* no era un guijarro muy poderoso en ese momento.
A la piedra le parecieron bastante curiosas las pantallas, pues de alguna manera entendía su contenido. Entendió que las pantallas se referían a sí misma de alguna manera, y que indicaban que el guijarro no era un guijarro muy poderoso en ese momento.
Ese pensamiento entristeció un poco al guijarro.
Ahora que era consciente de las cosas, se consideraba superior a todos los demás guijarros, ¡pero sus estadísticas indicaban todo lo contrario!
El guijarro no sabía muy bien cómo observaba su entorno, pero de algún modo lo hizo. A su alrededor había otras piedras, muchas de ellas bastante más grandes que él.
Al guijarro no le gustaba eso.
Quería ser la mejor de todas las piedras.
En ese momento, mientras estaba sumido en sus pensamientos, apareció una nueva pantalla.
¿Qué es esto?
¡Una Misión! ¡Una Grandiosa… Misión… Heroica! El guijarro estaba listo para partir hacia el peligro, para buscar las misteriosas recompensas que podría recibir, cuando de repente recordó un detalle conmovedor. Era una piedra, y las piedras no suelen moverse demasiado.
¡Una trampa! ¡Una broma! ¡Una burla! ¿Quién sería tan cruel como para asignar una tarea tan monumental a un guijarro inmóvil? ¡Oh, la mayor de las maldades! ¡qué crueldad!
“¡Vamos, [Láser Heroico Volador Superpoderoso de Enlaces Atómicos de Agua]!”
“¡Tonto, toda el agua es atómica, no puedes penetrar mi [Escudo Impenetrable de Oscuridad que no puede ser Penetrado]!”
Por supuesto, la batalla continuaba en el fondo.
Justo cuando el guijarro estaba a punto de caer en una profunda depresión, una ráfaga de energía se desvió cerca de él, y fue lanzado por los aires.
El guijarro se quedó perplejo: ¡se estaba moviendo!
Por primera vez, el guijarro se movía de aquel lugar.
Disfrutó bastante de la sensación y notó un cambio en su pantalla de estadísticas cuando su vuelo llegó a su clímax.
Los números habían aumentado. El guijarro, contento, se dio cuenta de que debía volar más: cualquier cosa que hiciera crecer los números era buena. ¿Quizás incluso podría avanzar en su búsqueda?
El guijarro se dio cuenta entonces de que su vuelo estaba llegando a su fin, ya que volaba justo a la cabeza de una extraña criatura de piel roja. La criatura parecía estar luchando contra otra vestida de blanco. Y el guijarro volaba justo hacia la cabeza de la criatura roja…
Bonk
La criatura de piel roja se estremeció durante un segundo cuando un guijarro le golpeó en la cara, lo que permitió al vestido de blanco clavar su espada profundamente en el pecho de la criatura.
“Esto no ha terminado… Resucitaré dentro de 666 años, ¡y entonces la humanidad estará condenada!”.
“Je, no me importa. La oficina isekai sólo me contrató para un señor demonio. Me despido de este mundo de mierda.”
Se dijeron algunas palabras más, pero el guijarro ya estaba lejos, rodando montaña abajo. Pronto, una notificación apareció frente a él una vez más.
¡Había crecido!
Una inmensa alegría invadió al guijarro al darse cuenta de que se había convertido en un guijarro más grande. Era el comienzo de un camino hacia la grandeza. Lo celebró durante un buen rato mientras rodaba hacia abajo, y finalmente se fijó en más pantallas.
¿Una clase? El guijarro analizó lentamente cada nueva pantalla y juzgó que, efectivamente, quería ser un Rolling Stone. Para ser sinceros, ya lo era: el guijarro bajaba a gran velocidad por la montaña. El guijarro se centró en el mensaje y aceptó la clase.
El guijarro analizó su nueva habilidad y sus estadísticas y se sintió satisfecho. Había crecido. Además, había recibido una nueva y complicada habilidad. No sabía muy bien qué era una aceleración o un vector, pero tenía tiempo para aprender. Ya experimentaría.
Eventualmente.
Al fin y al cabo, una piedra es paciente.
El guijarro siguió rodando montaña abajo, esperando ansioso la oportunidad de probar su nueva habilidad. Siguió rodando hacia su gran misión.
Montaña abajo.
Hacia el desconocido y oscuro horizonte.
Hacia donde ningún guijarro había ido antes (probablemente).
Y así, un valiente héroe se puso en marcha, como muchos habían hecho antes.
Esta es su historia.