Capítulo IX
Partieron en una aventura
La ciudad de Bakatar es la tercera ciudad más importante de Soljinar, uno de los tres reinos humano del continente. Su principal economía deriva de la agricultura y ganadería, siendo la principal ciudad que suministra trigo y carne en el reino. Esta ciudad es famosa por ser pacífica y segura, lo cual es ameritado al trabajo de sus guardias y la dirección de su regente, el Marques Elgar Korfral.
Esta ciudad también es famosa entre los alquimistas, gracias a su gran cercanía al bosque de Elt y el bosque de las canciones eternas; en sus mercados se encuentran una gran variedad de hierbas e ingredientes necesarios para realizar pociones.
Las calles de la ciudad de Bakatar cobran vida al nacer el sol, los mercaderes abren sus tiendas y la gente sale a sus trabajos diarios. Alum caminaba por las calles jalando de las riendas de Escarcha; a pesar de tener suficiente espacio por las calles para montar con tranquilidad, no lo hacía porque a su lado se encontraba el maestro del gremio de aventureros Gouther Furke. Era por respeto a su acompañante que no montaba. Alum había llegado a la ciudad hace algunas horas, fue interrogado por los guardias del marqués y luego llevado a descansar hasta que Gouther llego a verlo para escuchar su historia. Ahora se dirigían al gremio de aventureros donde debía dar los detalles del ataque.
— lamento no poder dejarte descansar a pesar de tu largo viaje Alum, pero, el tiempo es preciado en estos momentos.
— si hay algo que pueda hacer para ayudar con gusto lo haré.
— pero debo decir que es un gran animal: lograr hacer un viaje tan largo en medio día sin la asistencia mágica. Es en verdad impresionante.
— sí, es un gran animal, su nombre es Escarcha.
— ¿es de tu granja? — inquirió Gouther con obvia intención de adquirirlo en posesión.
— No — respondió apresuro Alum al sentir las intenciones de Gouther — le pertenece al aventurero que me salvo de entre los escombros.
— ya veo, ¿dijiste que te curo usando un pergamino?
— eso escuche de los demás
Como maestro de gremio Gouther conocía la ubicación de todas las misiones y los grupos que las tomaron; él que estaba seguro que no había ningún grupo cerca del pueblo de Edrinjor, por lo que, supuso que no era un aventurero de Bakatar.
— Llegamos; el establo del gremio está en la parte de atrás, ata al caballo y entra por favor
El gremio de aventureros era un edificio de tres pisos de altura y muy amplio, a simple vista se podía decir que de largo abarcaba al menos 30 metros.
La mayoría de los aventureros llegaban a las cinco de la mañana. Con los primeros rayos de sol, cada grupo seleccionaba las misiones que querían realizar y partían mientras los rayos de sol eran débiles, por lo que, no tenía muchas esperanzas de encontrar un gran número de aventureros dentro del gremio, de hecho, estaba preparado para no encontrar a ninguno y tener que enviar a la recepcionista o mensajeros a llamar a los aventureros que aun quedaran dentro de las posadas en la ciudad. Para su sorpresa, el gremio se encontraba parcialmente lleno con muchos grupos de aventureros, dejándolo desconcertado.
Por dentro era espacioso; la primera planta no estaba dividida, simplemente eran salones compartidos que tenían uno que otro poste que sujetaban los pisos superiores. Delante de la entrada se encontraba una recepción y a un costado de esta había una pizarra con varios pergaminos pegados con chinches, esté era tan amplio que muchas personas podrían pararse alineadas frete a este. Por la derecha se podían ver algunos sillones; disponibles para que la gente esperara sentada cómodamente. A la izquierda se podían apreciar muchas mesas de madera con espacio para al menos 6 personas cada una, estas eran las mesas donde los hambrientos y sedientos podían servirse. Por lo general, cuando caía la noche algunos miembros se reunían a beber y comer dentro del gremio.
La decoración no era pobre; por sus paredes y pilares se podían apreciar cuernos con aceite para alumbrar, pero más parecían decoraciones ya que la luz que emanaba de piedras mágicas que se encontraban pegadas a la pared, era más que suficiente. Por uno que otro lado se podía apreciar cabezas de algunas bestias pegadas en maderos colgando de las paredes: tigres con enormes colmillos que sobresalían de sus fauces, cabezas de osos entre otras. Por las esquinas se observaban jarrones con plantas y una que otra escultura de lo que parecían ser seres mágicos como: la Dríade, la cual era más similar a una planta, su cuerpo tenía forma de humano, pero estaba hecho de ramas y lianas entreveradas.
— Elinor — Gouther se dirigió a la joven que se encontraba al otro lado del mostrador.
— Maestro del gremio, bienvenido de vuelta — lo saludo una joven de cabello rojizo.
— ¿qué sucede aquí?
— ¡buenas! Líder… escuchamos que el Marqués lo llamo a su salón y nos dio curiosidad por saber la razón por la que llamarían al maestro del gremio de aventureros
Un hombre interrumpió antes que la joven pueda responder, este era de constitución delgada y de gran altura, llevando una armadura descubierta de los hombros, sin yelmo y con brazales, tenía sus pantalones marrones y botas de cuerpo, Pero, lo que más resaltaba aparte de su pobre armadura era su calva cabeza con un tatuaje de serpiente mostrando sus colmillos. Al escucharlo, todos los aventureros de pronto guardaron silencio en espera de la respuesta de Gouther.
— ya entiendo; ¿pensaron que traería una misión especial por parte del marqués? — inquirió Gouther aparentando decepción al ver la avaricia dibujada en sus rostros.
— Y… de que se trata maestro… — volvió a cizañar el hombre; Gouther dibujo una sonrisa en su oculto rostro y luego hablo emocionado.
— ¡pues es su día de suerte!; tengo una misión de carácter libre de 800 monedas de oro
El gremio estallo en gran bullicio cuando todos los aventureros empezaron a murmurar entre ellos.
— el contenido de la misión es la siguiente: defender y proteger los pueblos colindantes de Edut, Corve y Edrinjor y el rescate de los rehenes cautivos de los mismos.
— espere maestro Gouther, quiere decir ¿que estos pueblos están en peligro de ataque? — preguntó un aventurero.
— ¿cómo puede ser posible?… ¿a qué nos enfrentaremos? — preguntó otro que parecía ser un mago, con su túnica marrón y el bastón en su mano.
Los aventureros comenzaron a preguntar con asombro y nerviosismo a lo que Gouther les respondió.
— Un grupo de goblins arraso con el pueblo de Edrinjor, de todos sus habitantes solo sobrevivieron 17 personas entre niños mujeres y hombres
— ¡¿cómo puede ser posible?! — preguntó incrédulo un aventurero, este parecía ser un guerrero por su robusta armadura e imponente presencia.
— Los pueblos tienen torres de vigías y reclutas de soldados; es imposible que un grupo tan grande de goblins se forme en el bosque de Elt — comentó uno que traía armadura de cuero y un arco en su espalda con un Carcaj lleno de flechas, este era un Arquero.
— ¿no se trata de un ejército del rey Goblin? — preguntó una mujer con túnica blanca, parecía ser una sacerdotisa.
— Puedo asegurarles que no se trata de un ejército — respondió Gouther rápidamente para evitar de que se hicieran más suposiciones.
— ¡¿cómo puede estar tan seguro Maestro del gremio?! — preguntó un mago con túnica azul y capa negra.
— un soldado tiene un nivel superior al 30, pelear contra soldados goblins con superioridad numérica y aun de mayor nivel; ¡eso es suicidio! — exclamó un hombre con armadura de cuero y dagas en la cintura, este era un Rogue.
— Porque escuche todos los detalles del ataque de un sobreviviente — exclamó Gouther vociferando con fuerza.
Saliendo del bolleo de aventureros que lo habían rodeado; Alum se paró a un lado de Gouther.
— Él es Alum Bylow; un joven del pueblo de Edrinjor — exclamó Gouther con fuerza para que todos escucharan.
— si él ya está aquí; ¿hace cuanto fue el ataque?, el viaje a pie tarda al menos dos días, hasta que lleguemos nunca alcanzaremos a los que fueron raptados y habremos perdido nuestro tiempo — exclamó un arquero.
— Salí de mi pueblo ayer al atardecer, pero el ataque fue en la noche del día anterior cerca de la media noche — respondió Alum; todos parecían dudar un poco, si bien ellos podrían hacer esa distancia en tan poco tiempo con caballos reforzados con hechizos mágicos, que un simple niño de pueblo lo lograra no era algo común de ver.
Si lo pensaban detenidamente la cronología de los eventos no cuadraba bien, aun así, no era algo imposible por lo que terminaron aceptándolo como un hecho verdadero.
— un día y medio de ventaja, sería muy difícil lograr alcanzar a los capturados considerando de que se hayan escondido en el bosque y los Ranger tuvieran que buscar su rastro, no importa como lo piense es imposible su rescate — afirmó un aventurero, este tenía un mandoble en su espalda, por lo que debía ser un guerrero.
Los Ranger eran una clase avanzada, estos comenzaban como Arqueros y luego de alcanzar ciertas destrezas y obtener habilidades como rastreo y percepción su clase cambiaba a Ranger; luego esta podía alcanzar un nivel más alto llegando a la clase Cazador.
— no creo que se deban preocupar por eso; un grupo de aventureros ya se encuentra buscándolos. Los aldeanos del pueblo de Edrinjor que rescataremos se encuentran escondidos en una caverna a la orilla del rio. Dejaremos a los capturados de ese pueblo a esos aventureros — indicó Gouther.
Alum quería corregir a Gouther, Kai estaba solo, pero, este lo detuvo haciendo un gesto, eso le indico que no debía decir nada; Alum se dio cuenta del mensaje oculto y guardo silencio.
— ¿quiere decir ya hay un grupo dentro de la misión? — preguntó un hombre con grandes músculos y robusta armadura, en su espalda traía un escudo grande y en su cintura una espada corta; este era un Escudero. Esta clase se derivaba de los Guerreros. Son caracterizados por su gran resistencia al daño y su fuerza, la cual es superior a todas las clases; esta clase es la encargada de llamar la atención de los enemigos y dirigir los ataques a ellos, evitando así, que los demás miembros sufran daño.
— Alum; creo que deberías comenzar a hablar todo lo que recuerdes del ataque — propuso Gouther.
Gouther no quería darles tiempo para pensar; no quería que se dieran cuenta de pequeños detalles por los que tal vez decidirían no participar. Gouther consideraba que los primeros aldeanos captados ya no podrían ser rescatados y aunque no había consolidado todos los detalles de la misión con el marqués, estaba seguro que este, comprendería que era imposible. Pero no todos compartirían su confianza en el marqués y podrían decidir no participar por miedo a perder su tiempo o su vida por un trabajo imposible de cumplir y del cual no se les pagaría.
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El bosque de Elt era un bosque denso en algunas partes y en otras espacioso, dentro, muchas criaturas vivían: criaturas mágicas, diferentes tipos de bestias, humanoides salvajes y muchas más; pero sin duda alguna; las más peligrosas llegaban a ser las Bestias Mágicas.
El boque de Elt era basto, abarcaba desde el nor-este del reino de Soljinar hasta el sur-oeste del reino Goblin llegando al pie de las montañas pico de dragón, luego se unía al bosque de las canciones eternas en el extremo norte de Soljinar el cual se extendía por todo el reino Elfico de Mondlicht hasta la costa este del continente.
Un grupo de hombres que vestían armaduras similares corrían entre su maleza e inmensos árboles. A pesar de hacer todo lo posible por avanzar con sigilo, las hojas secas sonaban con cada pisada que daban, aun así, el sonido no viajaba tan lejos y su enemigo aun no estaba a su vista. Reduciendo la tensión que sentían al producir tanto ruido. El grupo quería principalmente escapar de la audición elevada de los Ranger, por lo que procuraban no hacer gran ruido.
— Mi Señor, por favor dígame por que avanzamos por la orillar del rio en lugar de haber cruzado antes por el puente — inquirió Narsis.
— pasando el rio hay un camino, este camino llega a una iglesia y de esta a un sendero que conecta al camino que lleva a la ciudad goblin más cercana.
— ningún mapa señala que haya un camino al otro lado del rio salvo el que conecta el puente a la aldea que lleva al reino de los elfos y los pueblos de Edut y Corve
— lo sé, dentro de mi mapa tampoco estaba, pero yo viaje por ese camino y sé que existe
— entonces no debimos cruzar el rio por el puente y luego entrar al bosque; luego pudimos simplemente bajar a la orilla y seguir el río
— antes de que despertaran revise los alrededores y seguí las huellas del camino pasando el puente, pero estas nunca bajaron hacia el bosque, además si la dirección que apunto el niño es correcta, los goblin entraron al bosque mucho antes de cruzar el puente. Si el camino no está en los mapas cabe la posibilidad de que más abajo exista un puente que tampoco esté en el mapa
— entonces fue así como un grupo tan grande de goblins cruzo la frontera sin ser detectados; usaron un camino oculto.
Kai no pudo evitar pensar que podría estar equivocado, él había viajado por ese camino, pero no recordaba haber visto algún indicio del paso de un ejército, pero, su instinto le decía que este era el camino correcto. Habían partido del pueblo hace poco más de medio día, sin descanso. Los rayos del sol iluminaban el cielo y pronto llegarían al medio día, aunque toda la noche viajaron sin descanso no habían encontrado ningún rastro visible de los que perseguían.
— Mi Señor no quiero sonar insensible, pero necesitamos descansar; de nada serviría entrar en contacto con el enemigo estando agotados como para poder pelear — propuso Narsis.
Kai detuvo su paso y por su detrás muchos sonidos metálicos se escucharon chocar contra el suelo, entonces se dio cuenta de lo desconsiderado que había sido, estos hombres no eran soldados y mucho menos guerreros como él, de hecho, era un milagro que hayan aguantado tanto tiempo su ritmo acelerado; al darse vuelta pudo ver a todos los hombres tumbados en el suelo.
— ¡Revélate! Espacio inexistente Bolsa infinita
Kai extrajo toda la carne que aún le quedaba dentro de su bolsa mágica, junto con las especias la entrego a Narsis. Antes de partir habían racionado las provisiones. Trayendo solamente lo necesario para tres días, no había suficiente comida en el pueblo como para pensar en las raciones de los capturados; la idea era conseguir todas las provisiones que se habían robado de los almacenes del pueblo, pero, Kai estaba convencido de que las provisiones estaban con el grupo en campaña y no con los que volvían, a pesar de eso, no quiso recalcarlo ya que eso no solucionaría nada, solo traería preocupación innecesaria. También tenía pensado conseguir comida del bosque durante su viaje de regreso. Si uno sabia buscar el bosque ofrecía mucha comida, por lo que no morirían de hambre.
— descansaremos aquí; preparen una fogata, aliméntese y duerman un poco. Yo iré a revisar los alrededores — ordenó Kai antes de adentrarse en el espesor del bosque.
Una vez que su figura se perdió entre los árboles los hombres se comenzaron a mover preparando el fuego y dos de ellos se acercaron a Narsis; no habían tenido tiempo de hablar desde que despertaron en el centro del pueblo reducido a cenizas y aprovecharon este momento para despejar sus dudas.
— Narsis; ¿Quién es ese hombre? Nunca he escuchado de un noble con ese apellido — comentó uno de ellos.
— no lo sé; estoy seguro de que no se trata de un noble de nuestro Reino — respondió Narsis.
— Entonces; ¿es del Reino Sagrado de Abiltar? O tal vez ¿del Reino de Baharus? — preguntó el otro.
— no estoy seguro, pero, creo que es del Reino Sagrado; viste la decoración de su yelmo y también estas armaduras, solo he visto algunos aventureros con un yelmo similar y estas armaduras, eran aventureros del Reino Sagrado— comentó Narsis.
— ¿pero en verdad es un aventurero?; Ustedes vieron como extrajo con magia estas armaduras y todas están encantadas, además nos curó con pergaminos de hechizos de curación —comentó el primer hombre.
— un aventurero que dispone de tanta riqueza; me resulta difícil de imaginar, la mayoría intenta juntar el suficiente dinero para retirarse a un pueblo y vivir tranquilo: Narsis es un ejemplo de ello — dijo el segundo.
— puede que se trate de un Caballero Sagrado — comentó Narsis, mientras estaba sumergido en sus pensamientos.
Todos quedaron en silencio pensativos ante el comentario de Narsis, después de varios segundos uno hablo.
— ya veo; mi suegro era un aventurero del Reino Sagrado y una vez me conto de los Caballeros Sagrados, según me dijo: la gran mayoría son nobles con un linaje de sacerdocio, también me conto como estos hacían viajes de peregrinaje luchando contra criaturas de la noche o seres malignos para conectarse con su dios, también me hablo de que Abiltar también entrena hombres de otros reinos, así que aún hay la posibilidad de que sea de otro reino — comentó el primero.
— no creo que sea de otro reino, recuerda como uso tantos pergaminos; si es un noble de Abiltar, tendría sentido. Pero, de que es un caballero sagrado no hay duda; es por eso que se encuentra viajando solo y los pergaminos de curación son su suministro de emergencia por si es herido en batalla — comentó Narsis.
— Las armaduras mágicas serian repuestos por si la que lleva es dañada — otro señalo un punto más.
— El fuego está listo; Narsis, dame la carne… — Uno de los dos hombres que estaban trabajando acerco y los interrumpió.
— Toma — dijo Narsis entregándola — ahora basta de charla: descansen, duerman si pueden, yo hare la guardia; cuando regrese el señor Yagami los despertare y comeremos
— Como se esperaba de un ex-aventurero, se te dan muy bien estas cosas — comentó uno con tono burlón.
— ¡cállate!; solo me recuerdas lo débil que soy al ser de nivel 20
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Kai se desplazaba a paso veloz, en busca de algún indicio que le quitara la molesta inseguridad que sentía.
Sin nadie que lo acompañara por detrás, dejo de lado el sigilo, siendo solo uno, el ruido era mínimo y las posibilidades de ser visto a la distancia también eran mínimas, adicionalmente, él podía evitar hacer ruido innecesario por lo que también no se preocupaba mucho; en su mente solo tenía un objetivo y ese era cubrir tanto terreno como le fuera posible.
Esta situación le recordaba a sus días de casería, cuando su disparo con flecha no era mortal. Muchas veces tubo que perseguir al animal moribundo en el bosque montañoso.
— veo que pasas un mal momento; ¡Eh! paladín… — repentinamente se escuchó una voz y Kai detuvo su avance; ocultándose entre arboles por la sorpresa. Entonces noto que la esfera de humo morado había vuelto; moviéndose a su alrededor.
— ¿Qué no estabas sujeto a condiciones para manifestarte? — preguntó molesto al recibir el susto.
— lo estoy; es por ello que solo puedo estar unos minutos en este mundo — respondió Augustus.
— ¿a qué has venido?; No dirás que solo a saludarme —inquirió Kai intrigado.
— muy cierto; solo vine para darte un consejo, de seguro has visto la iglesia que se encuentra a unos ocho días de aquí. Tú bajaste por ese camino
— trece días diría yo, y sí; cometí el error de entrar y casi no salgo con vida, ¿Por qué?
— dime Kai Yagami, ¿no sientes una extraña sensación en el ambiente? — preguntó con clara intención de decir algo más.
Al escuchar eso Kai miro a su derredor y al no encontrar nada, cerro sus ojos para concentrar sus otros sentidos, después de varios segundos de búsqueda, llego a la conclusión de que no había nada cerca salvo los pequeños animales e insectos, cuyos sonidos eran claramente captables a su oído.
— ¿no?; concéntrate paladín… intenta sentir la energía a tu alrededor, luego amplia tus horizontes y busca más lejos
Para Kai, Augustus era un enemigo, pero a la vez, Kai estaba seguro de que Augustus no quería que él muriera, aún. A regañadientes decidió seguir su consejo; con la intención de aprender tanto como le fuera posible, por ello, cerró los ojos.
Como se le había indicado se concentró; no entendía cómo lograr sentir la energía, pero para aprender primero debes intentar como te indica tu maestro: eso era lo que había aprendido tras largos años como discípulo.
Se concentro y de uno en uno sus sentidos se apagaron: primero su vista, luego desapareció su audición; ya no captaba ningún sonido. Seguidamente su olfato y su tacto; le daba la sensación de que estuviera en el vacío. En este mundo no existía nada, solo él.
Fue entonces cuando sintió una repulsión similar a cuando había visto a Augustus, no, no solo sentía repulsión, si no, a su vez… una atracción. Era una fuerza invisible que lo llamaba, entonces recordó que era eso mismo lo que sintió dentro de la iglesia. Aunque sus sentidos gritaban que saliera de ahí, algo dentro lo llamaba, lo incitaba a entrar más profundo hasta que finalmente había caído en la trampa del no muerto.
— Los muertos de la iglesia — Kai comenzó a murmurar.
— Por fin lo sentiste; sí, una horda de no muertos se dirige aquí — comentó Augustus.
— ¿me persiguieron desde que Salí de la iglesia? — se preguntó, pensante mientras espiaba como buscando algo.
— no, no sería correcto decir que te persiguen, de hecho, se siente más como que te estuvieran buscando —Augustus respondió al murmullo de Kai — lo sagrado atrae a los no muertos, los cuales buscan el descanso eterno, pero, a esta distancia no deberían siquiera sentirte, aun así, se siente como si avanzan directamente hacia ti; como si algo los estuviera dirigiendo
De pronto la esfera se desvaneció. Kai ahora lograba sentir con facilidad la energía de los no muertos, pero, aun estaban muy lejos. De la nada surgió una preocupación; si los goblins con los aldeanos capturados se encontraban con los no muerto lo más seguro era que se desviarían del camino entrando al boque, esto haría imposible encontrarlos o tal vez simplemente los abandonarían como sacrificio para ganar tiempo y escapar, fuera cual fuera la decisión que tomaran, Kai ahora tenía menos tiempo para rescatarlos.
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Mientras avanzaba metido en sus pensamientos, un sutil aroma llego a su nariz. Respiro con fuerza para estimular su nariz y captar mejor el olor; en instantes, identifico su procedencia. Era el olor desprendido de la madera quemada.
— ¿su campamento está cerca? — se preguntó.
Kai se desplazó con tanto sigilo como le fue posible, pero, al llegar al origen del humo se dio cuenta de que fue un esfuerzo en vano.
El fuego ya estaba apagado y el campamento recogido, solo quedaban los indicios de lo que había pasado: la sangre manchaba las hojas del suelo y entre estas quedaban los vestigios de lo que antes fue una persona. Huesos despojados de carne junto con algunas partes del cuerpo que aún conservaban su forma; a lo largo del campamento se encontraban los restos de lo que antes fue un hombre, pero ahora solo era restos de un festín.
— ahora estoy seguro; siguieron por la orilla del rio, tiene que haber un puente más adelante
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Alum había terminado de contar tanto como lograba recordar del ataque que sufrió, entonces, Gouther tomo su lugar en el centro del grupo y comenzó a hablar:
— cómo se habrán dado cuenta; no nos enfrentamos ni aun ejercito ni tampoco a un grupo normal de goblin, al parecer algunos soldados goblins dirigen al resto
— sería una batalla difícil, pero, no imposible — un guerrero afirmó con el aplomo de su experiencia.
— en vista de que pueden llegar a enfrentarse a uno que otro goblins de hasta nivel 40 o superior; he decidido restringir la misión a aventureros de tercer grado o superior; aquellos aventureros sin grupo pueden formar un grupo provisional. Para los que tengan sus grupos, solo permitiré grupos con rango plata para delante.
Los aventureros se clasificaban de muchas formar; primeramente, estaba su clasificación independiente, la cual se basaba en su nivel, un aventurero de nivel 1 al 19 era de primer grado, uno de nivel 20 a 29 era de segundo grado, y así sucesivamente hasta que llegaba al nivel 50 a 59 entonces se denominaba aventurero de segunda clase y luego estaban los pocos que alcanzaban el nivel 60 para delante, estos se denominaban aventureros de primera clase.
Adicionalmente estaba su clasificación como grupo, los grupos de aventureros se formaban de a 5 integrantes; la sumatoria de sus niveles y dividido por el número de integrantes daba una media del nivel del grupo. Esta media de nivel era clasificada como: Hierro para grupos con un nivel medio de 1 a 19, Acero para una media de 20 a 29, y posterior mente estaban los grupos: Plata de 30 al 39, Corindón de 40 a 49 y Oricalco de 50 a 59. Por encima de todos estos estaban los grupos Diamante los cuales tenían una media superior al 60.
Entre los murmullos llenos de quejas una voz fuerte sonó desde afuera del círculo de aventureros.
— soy el capitán Jhor Kruhter, vengo con los caballos y carretas de parte de la guarnición del ejercito
Entonces Gouther se abrió camino de entre la muchedumbre y fue a su encuentro. Todos los aventureros comenzaron a hablar sobre qué hacer, al poco tiempo Gouther volteo a mirarlos y hablo:
— ya no podemos perder más tiempo, los líderes de grupos; den un paso al frente si van a participar
Por unos momentos todos continuaron hablando entre sí hasta que uno de ellos dio un paso al frente y dijo:
— mi grupo participara
— muy bien, tu y tú grupo salgan a fuera y monten — ordenó Jhor con evidente autoridad.
Inspirados por la seguridad en los rostros que salían del edificio, cuatro aventureros más dieron un paso al frente y contestaron que participarían, inspirando a otros más.
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La calle del gremio que daba a las puertas de la ciudad fue aislada por los guardias y la gente se amontono en las aceras para ver con curiosidad; delante de ellos un gran número de caballos marrones, negro, otros blancos y más colores, pasaron galopando a gran velocidad mientras algunos tiraban de carretas, dando un gran espectáculo.
Los magos habían lanzado magia a los caballos como sobre las carretas. La magia “levitar” reducía el peso de las carretas y el movimiento de estas por la irregularidad del camino, haciéndola ligera y más amortiguada.
Sobre los caballos lanzaron “Vigor reforzado” que les aumentaba la resistencia, logrando que galopen más tiempo a gran velocidad. “Segundo aliento” regeneraba de manera continua el vigor gastado, haciendo que puedan galopar a su máxima velocidad sin cansarse.
Por delante de todos iba Jhor en su caballo blanco y a su lado Escarcha montado por Alum; a pesar de que la magia tenía duración de solo una hora se lograba un efecto prolongado lanzando el hechizo nuevamente tras que se terminara su efecto, esto era hecho por el sacerdote de cada grupos de aventureros. Durante la misión se desplegaron 6 grupos de tercer grado y solo uno de cuarto grado.
