GDK – Capítulo 761

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Capítulo 761: Termina lo que comenzaste


“Vamos al Restaurante Bendición Divina. Escuche que su comida es bastante buena”, dijo Han Shuo sonriendo a la vacilante Bechymos.

Ella estaba bastante sorprendida de que él accediera a su demanda tan fácilmente. La Bendición Divina no era llamada el restaurante más caro de Ciudad Hushveil por nada. Cada plato y botella de vino podría costar unos cientos de monedas de cristal negro. Estaba más allá de lo que algunos miembros de los clanes pequeños pudieran costear.

Después de pensarlo por un momento, sin conocer las capacidades financieras de Han Shuo, Bechymos sugirió, “sólo vamos a otro lugar. No quiero que vendas tu casa sólo por una comida”.

«No te preocupes por eso, Bechymos. ¡Él puede pagar!” dijo Charlotte sonriendo. Sabía que tan prospera se había vuelto la Perla Celestial en la Ciudad de las Sombras y como un empresario exitoso, gastar en un restaurante sería insignificante.

“Vamos, yo invito”, Han Shuo giró hacia Rose y le hizo señas.

Ella había estado en silencio todo ese tiempo. Era como una forastera al lado de Han Shuo. No mostraba ningún interés en Charlotte o Bechymos. Los siguió todo el camino con sus ojos viendo al suelo.

Con Charlotte y Bechymos mostrando el camino, los cuatro llegaron al Restaurante Bendición Divina en Ciudad Hushveil. Ambas parecían ser clientas frecuentes del lugar. Consiguieron una mesa localizada en un sitio excelente donde podían observar una interminable corriente de personas debajo de ellos. No muy lejos había varias torres de energía que brillaban con luces coloridas.

Una camarera, llevando ropas profesionales muy ajustadas, se acercó a ellos sonriendo y dijo de la forma más educada, “Bienvenidos a la Bendición Divina. ¿Puedo tomar sus órdenes?”

Habiendo cultivado hasta ese reino en las artes demoníacas, Han Shuo no necesitaba comer. Sonriendo señaló a Bechymos y dijo, “¡pregúntale a ella!”

“Realmente parece que estás haciendo un buen dinero, ¿huh?” Bechymos rio suavemente antes de ordenar casualmente algunos platos y una botella de vino llamada ‘Fantasía de Mora’. Después de que la camarera se fue, Bechymos preguntó, “¿cuándo llegaste al Elysium? ¿Qué has estado haciendo?”

“Hace alrededor de veinte años. El Elysium es muy grande. Encontré algunas cosas por las que vale la pena luchar en este mundo”, Han Shuo no le respondió a Bechymos todas sus preguntas. Él arrugó sus cejas y preguntó, “cierto, ¿eres miembro de la Familia Bruckner?”

“Si, lo soy, ¿qué ocurre?” Bechymos parecía confundida cuando él le preguntó por su clan. No podía entender por qué le preguntaba sobre ello.

Repentinamente, Charlotte se puso de pie, se inclinó ante Han Shuo y se disculpó solemnemente, “Señor Bryan, realmente lo siento por el incidente de la última vez. ¡Por favor, perdóname!”

Bechymos se confundió incluso más. Quedó en blanco por un momento y preguntó, “Charlotte, ¿qué estás haciendo?” Giró hacia Han Shuo y le dio una mirada confundida, “¿desde cuándo te llamas Bryan?”

En aquel entonces en el Reino del Abismo donde no había nadie que lo conociera, él se presentó con su nombre original, Bechymos incluida. Por tanto, ella estaba confundida cuando Charlotte lo llamo Bryan.

“Nuevo plano material, nuevo nombre. Aquí, me llamo Bryan. Pero, desde luego, tú todavía puedes llamarme Han Shuo. Ambos nombres sirven”, explicó Han Shuo mientras se encogía de hombros. Giró hacia Charlotte y respondió, “muy bien. Por el bien de Bechymos, olvidaré lo que ocurrió la última vez. Si todavía estás interesada en comprar medicinas de mi Perla Celestial, podemos discutir los términos después”.

Después de escuchar esas palabras, Charlotte sabía que él finalmente la había perdonado por salvar la vida de Portlem en la Ciudad de las Sombras. Estaba encantada. La agradeció sonriendo, regreso a su asiento antes de informarle a Bechymos, “él es el Señor Bryan de la Ciudad de las Sombras, del que te conté. ¡Es el amigo con el que te encontraste en el Reino del Abismo!”

El hermoso rostro de Bechymos estaba lleno con una sorpresa abrumadora después de escuchar la explicación. Gritó con incredulidad, “¿¡Cómo es eso posible!?”

Charlotte le había contado sobre las milagrosas medicinas de Han Shuo así como también el incidente en el salón de banquetes en la Perla Celestial. Le había dado un gran énfasis en que tan despiadado fue él cuando trato de matar a Portlem. Sin embargo, en el Reino del Abismo donde Bechymos se encontró con él por primera vez, sólo lo conocía por ser milagroso y no por una poderosa fuerza. Por tanto, Bechymos no había asociado al poderoso experto quien pateó el trasero de Portlem con la persona mágica que ella encontró.

De hecho, estaba dentro de las expectativas de Charlotte que Bechymos se asombrara enormemente al escuchar eso debido a que ella misma estaba incrédula al darse cuenta de que Han Shuo era la persona mágica que Bechymos conoció en el Reino del Abismo.

Basada en las palabras de Bechymos, cuando se encontraron en el Reino del Abismo, la fuerza de Han Shuo era más débil que la suya, pero sólo dentro de un par de décadas, él tenía la fuerza suficiente para lastimar seriamente a Portlem – lo que significaba que él se las arregló para trascender del reino del dios menor al del dios alto en unas décadas. ¡Ese rango de progreso era simplemente inimaginable!

Bajo las miradas de duda de Bechymos, Charlotte forzó una sonrisa y dijo, “sabes que no te haría esa clase de bromas. Es verdad. Él es el maestro de la Farmacia Perla Celestial en la Ciudad de las Sombras”.

Bechymos se asombró incluso más. Miró a Han Shuo con ojos incrédulos y preguntó, “¿comenzaste a ocultar tu fuerza verdadera desde que llegaste al Reino del Abismo?”

Han Shuo forzó una sonrisa. No sabía cómo responder a su pregunta. No había ocultado su fuerza verdadera en el Reino del Abismo. Pero si él le dijera la verdad, quizás no le creería. Por tanto, después de un momento de vacilación, de forma indispuesta asintió.

“¡Tu bribón, siempre en guardia en contra de todo el mundo!” Bechymos miró enfadada a Han Shuo y remarcó, “que tonto de mi parte al preocuparme por que tuvieras problemas para sobrevivir en el Elysium. ¡Incluso planeaba darte una referencia para que te unieras a mi clan! ¡Y resulta que me he estado preocupando por nada!”

Después de terminar esas palabras, Bechymos repentinamente le grito a la camarera y le ordenó, “cancela nuestra orden. ¡En su lugar sirve el menú más costoso!” Bechymos estaba molesta. ¡Estaba dispuesta a desangrar a Han Shuo!

“¡Si, de inmediato!”, la camarera estaba alegre e inmediatamente le respondió.

Muy pronto, platos tras platos que Han Shuo nunca antes había visto antes fueron servidos continuamente. La mesa estaba abarrotada con comida. Bechymos masticaba vigorosamente las tajadas de carne finamente cocinadas mientras miraba enojada a Han Shuo. Parecía estar imaginándose a sí misma masticando la carne de él.

Charlotte de alguna manera estaba sorprendida por su conducta. No esperaba que ella pudiera actuar de una forma tan grosera frente a un hombre.

Rose había estado en silencio todo el tiempo. Pero cuando la deliciosa comida fue servida, se sirvió ella misma sin que nadie le dijera. Tomaba los platos más hermosos y se deleitaba comiendo la comida de la mesa. Era como si ella y Bechymos estuvieran teniendo una competencia de comer.

Han Shuo simplemente había saboreado un poco de cada plato en la mesa. Ni siquiera bebió mucho vino. Aunque no era un gourmet, sentía que la comida y el alcohol eran excelentes. Tenía el sentimiento inquietante de que todos serían costosos.

Cuando llegó el momento de pagar, sólo se sorprendió un poco cuando la camarera reportó que los platos costaban nueve mil seiscientas mil monedas de cristal negro. Han Shuo en ese momento se había convertido en un sucio hombre rico y no renegaría de su promesa debido a que la cuenta era un poco alta. Bajo la atenta mirada de Bechymos, él lanzó directamente un saco que contenía diez mil monedas de cristal negro.

Bechymos, Charlotte y Rose habían bebido algo de alcohol con lo cual sus mejillas tenían un hechizante rojo. Lucían significativamente más atractivas con las mejillas rosadas en sus preciosos rostros, especialmente Bechymos y Rose quienes eran para empezar eran increíblemente atractivas. Incluso Han Shuo sintió como si su aliento se hubiera perdido por un momento.

Bechymos observó como él pagaba tranquilamente la cuenta. Remarcó suavemente, “¡realmente tienes una gran fortuna! Ni siquiera pestañeaste cuando pagaste diez mil monedas de cristal negro. ¡Eres incluso más extravagante que mi papa!”

«¡Vamos!” Han Shuo dijo y se levantó de su asiento. Mientras se marchaba, su majestuosa figura ensombrecía visiblemente a otros dioses en la Bendición Divina. Dado lo ostentoso que era y las tres encantadoras bellezas a su lado, muchos en el establecimiento secretamente le daban vistazos admirándolo, pensando, ‘¿quién es ese tipo afortunado? ¿Desde cuándo Ciudad Hushveil tiene un hombre con semejantes mujeres hermosas a su alrededor?’

La mayoría de esos quienes podían permitirse gastar en la Bendición Divina eran bastante influyentes en la ciudad. El círculo era pequeño y se conocían bien unos con otros. Como Han Shuo no les era un rostro familiar, comenzaron a preguntarse quién era.

Las tres damas también se levantaron de sus asientos y lo siguieron por detrás, dirigiéndose a la salida. Cuando estaban a punto de salir del lugar, Bechymos maldijo suavemente a un joven sentado cerca de la entrada, “¡qué desagradable pedazo de mierda!”

Del inicio al final, el joven había estado viendo lujuriosamente a las tres damas con una depravación obvia en sus ojos. La maldición de Bechymos era justa y merecida.

Sin embargo, como todos en la Bendición Divina estaban observando y admirando a Han Shuo, el restaurante era muy silencioso. La maldición fue clara para todos. Todos esos que comían en el restaurante giraron hacia el joven quien parecía bastante influyente con ojos asombrados, como si este se hubiera convertido a sí mismo en una broma.

Ese joven quedó en blanco por un momento antes de descubrir que las miradas de sus acompañantes se reunieron en él. Esperando no perder cara, miro a Bechymos siniestramente y se burló, “hey perra, ¿de quién estás hablando?”

El rostro de Bechymos se oscureció. Parecía incluso más disgustada y respondió, “¡de un pedazo de mierda revoltoso y sin cultura!” Después de eso, sin esperar desperdiciar más palabras, Bechymos apuro a Han Shuo, “¡vamos!” y se marchó apuradamente como si quisiera alejarse de una pila de excremento.

“Tres mujeres ebrias siguiendo a un hombre por detrás. Uno se pregunta cómo podrían acabar. ¡Qué mujerzuelas!” el joven dijo con una mueca lasciva. Después de escuchar esas palabras, aquellos que comían en la Bendición Divina pusieron rostros que implicaban un entendimiento sexual. Sus miradas hacia Han Shuo estaban llenas de admiración.

Han Shuo quedo en blanco por un momento. La escena de él comiendo a Charlotte, Bechymos y Rose para el postre, todas a la vez, floto de forma involuntaria a su mente. Una sonrisa extraña apareció en su rostro. Han Shuo sacudió su cabeza y pensó, ‘de hecho no soy un hombre virtuoso para poder fantasear algo lascivo en esta situación’.

‘¡Bofetada!’ una fuerte bofetada resonó a través de la Bendición Divina. Charlotte miraba fríamente al joven y dijo, “¡no me importa de qué clan seas, es mejor que cuides tu lenguaje!”

“¡Puta, como te atreves a atacarme!” chilló el joven. Los pocos guardias comiendo con él pusieron rostros helados, levantándose de sus asientos y rodeando a los cuatro en un instante. Al parecer el asunto no se resolvería fácilmente.

Como ese joven sólo tenía la fuerza de un dios medio, no pudo evitar la bofetada de Charlotte. Cuando Han Shuo finalmente volvió en sí, los guardias del joven los habían rodeado.

Él no le temía a los problemas. Sin embargo, su objetivo en Ciudad Hushveil era asesinar a Hassling y Avery. Si su identidad era expuesta antes de que ocurriera, eso dañaría severamente su misión. Viendo que la situación escaló a esa etapa, Han Shuo comenzó pesar en su mente la forma más rápida de resolver el asunto.

El joven sólo tenía la fuerza de un dios medio. Esos guardias que venían con él tenían fuerzas similares. Ninguno en su grupo era un dios alto. La mayoría de los que comían en el lugar poseían la fuerza de dioses medios. Aparte de Bechymos quien recientemente había roto en el reino del dios medio, todos en el grupo de Han Shuo tenían la fuerza de dioses altos y podrían acabar con el joven y sus guardias sin esfuerzos.

Sin embargo, estaban en un establecimiento respetable. Haciendo eso seguramente atraería la atención de ciertas fuerzas y tendrían problemas para marcharse. Si el asunto escalaba, era muy probable que se expusiera la identidad de Han Shuo. Si Avery o Hassling supieran que estaba en la ciudad, seguramente intentarían cazarlo y asesinarlo.

‘Esto quizás se pondrá difícil’, pensó Han Shuo mientras arrugaba sus cejas.

“Esta es Ciudad Hushveil. ¡Ustedes forasteros están cavando sus propias tumbas al buscar problemas aquí!” gritó el joven. Luego ordeno, “arréstenlos. ¡Llévenlos al Sexto Cuerpo para ser interrogados!”

Como en la Ciudad de las Sombras, Ciudad Hushveil tenía Cuerpos de Guardias Divinos. Pero a diferencia de Ciudad Hushveil, sólo tenía seis cuerpos. Al parecer ese joven era en efecto bastante poderoso en la ciudad. Esos guardias que lo seguían tenían un aire recto y disciplinado. Era obvio que eran experimentados y bien entrenados.

“¡Damas y caballeros, por favor lleven cualquier disputa que tengan al exterior!” Fue en ese momento que un anciano rechoncho con un cabello gris se acercó a ellos con una sonrisa profesional. Era como si él estuviera acostumbrado a ver situaciones como esa.

Como uno de los establecimientos más renombrados en Ciudad Hushveil, la Bendición Divina era más que un simple restaurante. El joven conocía a las fuerzas que respaldaban al establecimiento aparentemente inocente. Asintió hacia el anciano obeso, hizo retroceder a sus guardias y dijo, “¡estaremos esperando afuera!” El joven le dio a Han Shuo y a las tres mujeres una mirada helada antes de dejar el lugar.

Aquellos que comían en el local mostraron un gran interés en la pelea. Algunos pidieron la cuenta y salieron para mirar, mientras que otros observaban desde las ventanas.

“Él es de la Casa Grando, el más débil de los cuatro clanes mayores de Ciudad Hushveil”, Charlotte le dijo a Bechymos con una sonrisa ligera. Se dio la vuelta hacia Han Shuo y dijo, “no es importante”.

Han Shuo se sintió bastante sorprendido por las palabras de Charlotte. Pero después de pensarlo cuidadosamente, tuvo sentido para él. La Casa Bruckner tenía aproximadamente la misma fuerza de la Casa Sainte. Ambos eran clanes antiguos. Claramente, un clan que estaba cerca del fondo en Ciudad Hushveil no era suficiente para causarles alguna amenaza.

Han Shuo se tranquilizó al escuchar esas palabras. Asintió sonriente y dijo, “no quiero que sepan que estoy en Ciudad Hushveil”.

Charlotte quedó en blanco por un momento, preguntándose porqué dijo eso. Asintió y respondió, “bien. Déjamelo a mí”.

Rose había estado en silencio todo ese tiempo, pero parecía estar molesta. Claramente, también se enfadó por las ofensivas palabras del joven.

“¡Hermana Charlotte, dale una paliza a ese idiota!” dijo Bechymos con una voz helada.

«Olvídalo, estamos en Ciudad Hushveil y es mejor si evitamos problemas innecesarios. En cualquier caso, ya lo he abofeteado. Si conoce nuestras identidades, dudo que continué presionándonos con su Sexto Cuerpo”, la consoló Charlotte. También parecía indispuesta a escalar el asunto.

“Hermana Charlotte, ¡¿cómo podemos dejarlo sólo así?!” se quejó Bechymos.

Mientras hablaban, los cuatro habían salido del local. Charlotte miró al joven con ojos helados y estaba a punto de mostrar su identidad.

Pero antes de que pudiera hablar, el joven se apresuró a burlarse de Han Shuo, “hey hombre, derribar a tres mujeres a la vez debe ser maravilloso, ¿no es así? ¡Jeje, más tarde en el Sexto Cuerpo, te daré una experiencia incluso más maravillosa!”

El joven parecía enormemente interesado en Rose. Miró su cuerpo de la cabeza a los pies con ojos lascivos y dijo, “maldita sea, mujer de cabello blanco, eres totalmente mi tipo. ¡Voy a interrogarte con mi bastón!” De las tres, Rose había estado en silencio y no hablo en su contra. Pensando que ella era mansa, él la asaltó con sus obscenidades

Pero poco sabía, las personas introvertidas y calladas como ella usualmente eran las más letales. El joven había cometido un grave error al ofendería. No pudo ofenderle más al llamarla mujer de ‘cabello blanco’.

Han Shuo vio el brillo helado en los ojos de Rose y sabía que las cosas iban a empeorar. Antes de que pudiera decir algo, varias hebras de su cabello plateado se dispararon violentamente. La distancia entre el joven y Rose era muy corta. Ese tipo no pudo siquiera evitar la bofetada de Charlotte. En contra de Rose quien era incluso más poderosa, ese joven era incluso más impotente.

Varias hebras de su cabello se dispararon como rayos de luz y atravesaron el pecho del tipo en un instante. Rose agitó su largo cabello y lanzo lejos al joven cuyo pecho estaba salpicando sangre. Ya estaba muerto para el momento en que aterrizó.

El rostro de Han Shuo se sacudió. Viendo que ella atacó, sabía que ya no era posible resolver ese asunto pacíficamente. Antes de que Charlotte y Bechymos volvieran en sí, Han Shuo instruyó, “¡no dejes las cosas a medias, termina lo que comenzaste!”

El largo cabello de Rose comenzó a agitarse salvaje y despiadadamente lo lanzo sobre los aterrados guardias. Sus torsos fueron atravesados y todos murieron en el lugar.

“¿Qué están esperando? ¡Vuelen!” le gritó Han Shuo a Charlotte y Bechymos. Luego tomó la pequeña mano de Bechymos y voló hacia una parte muy desolada de la ciudad.

¡Todos los transeúntes y observadores chillaron con miedo y pánico!

¡No esperaban que Han Shuo y su grupo en realidad mataran a plena luz del día y tan despiadadamente! Quizás debido a que Rose era muy brutal, todos los transeúntes simplemente observaron cómo Han Shuo y las damas escapaban después de cometer el asesinato. ¡No pensaron en bloquearlo debido a que no tenían las agallas para enfrentarlos.